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El terremoto de magnitud 6.3 que sacudió este lunes por la tarde el norte de Filipinas, causó gran pánico cuando el agua de una piscina ubicada en la terraza de un rascacielos empezó a caer hacia la calle, cuando todos intentaban alejarse del edificio.
El fuerte terremoto habría ocasionado que las estructuras de la piscina del lujoso edificio Anchor Skysuites se quebraran, provocando la caída del agua a 181 metros de altura.
Los videos han sido compartidos en YouTube y en diversas redes sociales como Facebook y Twitter.
Hasta el momento se estima que cinco personas han muerto en este terremoto tras el derrumbe de dos edificios.
La gobernadora de Pampanga, Lilia Pineda, informó a medios locales de que en esa provincia hay al menos tres muertos, una anciana y dos menores de 3 y 7 años, en diferentes barrios del municipio de Porac .
El alcalde del poblado de Porac, Condralito dela Cruz, dijo que las cuadrillas de rescate extrajeron a dos sobrevivientes de las ruinas de la estructura, desde cuyo interior se escuchaban los gritos de la gente atrapada .
Entre los muertos sacados de los escombros había un niño. A uno de los dos sobrevivientes se le tuvo que amputar la pierna para poder zafarlo, dijo el concejal local Maynard Lapid.
Añadió que en cierto momento se podía escuchar a ocho personas atrapadas adentro, pidiendo auxilio.
“A una de esas personas se le veía antes haciendo señas desde una ventana, pidiendo ayuda, pero ya no se ve”, dijo Lapid a la AP por teléfono.
Por lo menos 31 personas están desaparecidas tras el derrumbe del mercado que estaba en la planta baja del edificio, en base a un cálculo preliminar hecho por los empleados, aunque podrían haber estado en otro lugar cuando ocurrió el temblor, dijo Lapid.
Foto: AP
El movimiento tuvo epicentro a 12 kilómetros de profundidad cerca de Castillejos, provincia Zambales, en el noroeste del país, dijo Renato Solidum, director del Instituto Filipino de Sismología y Vulcanología.
Con información de AP
lsm
