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La mancuerna que han formado el comentarista deportivo Christian Martinoli y el exjugador de fútbol Luis García ha sido una de las más famosas del mundo del deporte, pero aunque en la pantalla parece ser que ambos sostienen una relación fraternal que va más allá de lo profesional, Martinoli dio detalles sobre cómo es en realidad su convivencia.
Durante una entrevista para el canal de YouTube de Yordi Rosado el comentarista mexicano habló sobre su recorrido personal y periodístico hasta llegar a formar la dupla con el exjugador del Atlético de Madrid, a quien conoció primero como estrella, cuando buscaba entrevistarlo para su programa “El club”, que grabó en 1998 junto a Sandra Chaín.
“Yo entrevistaba a Luis cuando cuando él estaba en el América sobre todo; yo iba para entrevistas que me pedían en Estados Unidos y Luis venía de Atlético de Madrid y salía en la revista ´Eres´ a cada rato y estaba en ‘Lazos de amor’ y salía con Paco Stanley y con en ‘El Calabozo’ y pues era un rockstar y andaba con las actrices y con la cantante de Timbiriche”, recordó Martinoli.
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“Me cagaba, Luis era insoportable”, afirmó. “Nunca me dio una entrevista”, agregó Chistian, pues su cometido en varias ocasiones era conseguir que el delantero le concediera una entrevista exclusiva para poder llevarla a sus programas, sin embargo él lo ignoraba cada vez que se encontraban. Todo cambió cuando García llegó a Televisión Azteca buscando una oportunidad como cronista deportivo, donde Martinoli ya estaba consolidado.
“Cuando entró al Canal entró con mucha humildad… entró como el Gato con Botas con los ojos así (agachados) ‘soy Luis García’, antes eras todo déspota y ahora vienes todo humilde. Claro, el incursionaba en un lugar donde era un novato y no sabía, era un nuevo vestidor, era todo distinto”, recuerda.
La confianza y la personalidad cómica de Luis fue lo que poco a poco le abrió camino en la televisora, según contó su compañero.
“Él tenía muchas ganas de aprender cosas y yo ya tenía mucha experiencia, yo no fui jugador de fútbol profesional, ni mucho menos, pero entendía mucho de lo que él hablaba y se fue dando una conexión en donde él luego nos invitaba a su casa, que le llamamos ‘El castillo de Grace’, en El Pedregal”, detalló.
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Pero resaltó el hecho de que, después de trabajar por más de 20 años juntos, su relación nunca se ha consolidado en el plano personal, aunque han compartido momentos importantes como la boda de Martinoli y la primera comunión de los hijos de Luis, hoy son más que amigos, socios.
“En realidad Luis y yo no somos amigos, somos grandes socios y somos, digamos, súper cuates del trabajo", señaló.
"Luis y yo no nos frecuentamos fuera del trabajo, es que nos vemos tanto que hay un momento en que no nos queremos ver, entonces cuando nos vemos y vamos a comer nos divertimos como si nunca nos hubiéramos visto y decimos las mismas pendejadas de siempre y nos reímos mucho y nos divertimos y entre nosotros nos tiramos carrilla, pero en cuanto acabamos y bajamos de un avión en el Aeropuerto de la Ciudad de México agarro mi maleta y ‘ahí nos vemos güey, cuídate y hasta el próximo llamado’”, detalló.
Sin embargo también aceptó que, aunque han tenido algunas discusiones, la convivencia los ha aleccionado para formar un equipo que, además de en la televisión sabe cómo funcionar en la vida real sin dañar su armonía personal.
“Hemos sabido que somos mucho más fuertes juntos que separados y por consecuencia si tenemos una diferencia, la más mínima que sea y sentimos que se puede incrementar de la nada, de inmediato le digo ‘a ver güey ¿tienes 5 minutos?, a ver este pedo es así, o él (habla) y en tres minutos se acabó”, contó el también actor de doblaje.
melc
