Más Información
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) consideraron que la pandemia impactó con mayor fuerza al sector informal en Latinoamérica, además de que destruyó y precarizó empleos.
En el reporte “ Trabajo decente para los trabajadores de plataformas en América Latina ”, los organismos afirmaron que urgen políticas públicas que reviertan esta situación.
“La destrucción y precarización de los empleos, el aumento de la desocupación, la abrupta disminución de la participación laboral y los efectos en el empleo y la participación de las mujeres, entre otros, presentan desafíos de corto y mediano plazo para una transición paulatina hacia la pospandemia”, dijeron.
Los organismos afirmaron que la tasa de desocupación regional por la pandemia alcanzó 10.5% y fue la región donde más se contrajeron las horas de trabajo en todo el mundo, con una reducción de 16.2% en 2020 con respecto a 2019, porcentaje que es el doble del mundial de 8.8%.
Lee también:
Si se consideran el impacto en el empleo por sectores , en cuatro de éstos se concentró el 40% de la afectación en el 2020. La mayor pérdida de empleo se dio en el sector hotelero con 19.2%, construcción 11.7%, comercio 10.8% y transporte 9.2%.
Además de la industria con 8.6%, servicios 7.5% y agricultura que fue el sector con menor pérdida con 2.4%.
México representa alrededor del 20% de la población económicamente activa regional, además de ser junto con Chile el país donde más se revirtió el crecimiento de empleos del 2019.
La Cepal y OIT consideraron que el revertir el desempleo “dependerá tanto de la efectividad y la masificación de las medidas de control de la crisis sanitaria , en particular la vacunación, como de la robustez de la recuperación de la actividad económica en un contexto marcado por la fragilidad del tejido productivo y el sostenimiento de las políticas de transferencias e ingresos para trabajadores, empresas y personas”.
Lee también:
Para la Secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena, “dada la profundidad del impacto de la crisis en 2020 en los mercados laborales de la región, los países deberán implementar políticas que estimulen la generación de empleos particularmente en los grupos más vulnerables como los jóvenes y las mujeres”.
Esto implica poner énfasis en la recuperación del empleo en las categorías y sectores de mayor afectación, formalizar a los trabajadores, impulsar la promoción de la inclusión laboral de las mujeres y la regulación adecuada a nuevas modalidades de trabajo.
cev/nv
