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La contribución de las remesas a los hogares más desprotegidos, prácticamente es ignorada en la medición de la pobreza en México, afirmó el Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA).
Este problema, aseguró, es aún más grave a nivel estatal y, particularmente, en aquellas entidades que son las principales receptoras de remesas y que sobresalen por su reducido producto per cápita.
En un nuevo análisis, destacó que dichos recursos elevan los niveles de vida de los hogares receptores y alivian la pobreza, ya que la contribución de ese cuantioso ingreso, se destina principalmente a cubrir los gastos de manutención de los hogares mexicanos.
Ponderó que las remesas incrementan el ingreso disponible de los hogares, con lo que aumentan sus posibilidades de gasto en bienes de consumo, en capital humano incluyendo educación y salud, en inversión en la adquisición, mejoras y ampliación de la vivienda, así como en micro negocios.
"Todo ello incrementa el nivel de vida de los hogares receptores y reduce la pobreza", afirmó en el estudio "¿Se incluyen las remesas en la medición de la pobreza de los estados mexicanos?".
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Medición de pobreza de 2022
Sin embargo, lamentó que en la medición de pobreza de 2022 no se consideró a remesas equivalentes a 12.4 puntos porcentuales del Producto Interno Bruto (PIB) estatal en el caso de Michoacán.
Tampoco las equivalentes a 14.4 puntos porcentuales del PIB en Guerrero, y a los 10.8 puntos porcentuales de tamaño de sus economías en los casos de Zacatecas y Oaxaca, señaló.
Por eso consideró que es relevante evaluar el problema de subestimación de las remesas con relación al PIB de los estados del país.
Señaló que en 2022 en 23 estados del país, la subestimación del ingreso por remesas en la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH), con su consecuente efecto en la medición de pobreza, superó 90% y en 5 estados 95%.
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Se hace referencia que el año pasado México recibió 58 mil 510 millones de dólares por remesas familiares.
No obstante, en la ENIGH 2022, el ingreso anual proveniente de otros países fue de sólo 4 mil 932 millones de dólares, de manera que no se capturaron 53 mil 577 millones de dólares que seguramente elevaron los niveles de vida de millones de hogares receptores.
Estableció que en la medida que la ENIGH no capture adecuadamente los ingresos de los hogares por remesas en dichos estados, particularmente, en aquellos en que alcanzan cifras muy elevadas, tanto en su monto en dólares como con relación al tamaño de la economía estatal y no se aplique una corrección por tal deficiencia, se genera una fuerte sobreestimación de la medición de la pobreza en tales entidades.
Según el CEMLA, esto es importante ya que las remesas alcanzan montos elevados especialmente en algunos de los estados con los niveles más bajos de producto per cápita.
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vcr/mcc
