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Jalisco representa muchos de los símbolos que nos identifican como país; el mariachi, el tequila y la charrería recogen parte de esta identidad. En un recorrido por tres rutas por algunos de sus Pueblos Mágicos, podrás vivir la experiencia de adentrarte a la esencia de sus tradiciones, costumbres, artesanía y gastronomía.
LAGOS DE MORENO
En el corazón de los Altos, a poco más de dos horas de Guadalajara, esta población, fundada en 1563, presume de poseer el centro histórico mejor conservado de Jalisco.
El Teatro José Rosas Moreno, la Parroquia de la Asunción (de estilo barroco), la Rinconada de La Merced, la zona del Calvario (con las mejores vistas de Lagos), la antigua comunidad indígena de San Juan Bautista de la Laguna (reconocida por su artesanía autóctona) y las fiestas de agosto, son algunos de sus atractivos representativos.
Si te gustan las antigüedades, aquí encontrarás una de las casas más afamadas: Montecristo.
Para descansar, Hacienda Sepúlveda Hotel & Spa es un inmueble colonial transformado en un silencioso y tranquilo hotel boutique de 25 habitaciones, con una cocina que no defrauda (haciendasepulveda.com.mx).
SAN SEBASTIÁN DEL OESTE - MASCOTA - TALPA DE ALLENDE
Partiendo desde Puerto Vallarta, el recorrido inicia en San Sebastián del Oeste, lugar apacible rodeado de bosques cuyas construcciones e historia evocan la grandeza de su pasado minero. Imperdible subir al Cerro de la Bufa —desde el que verás Bahía de Banderas—, visitar la Mina de Santa Gertrudis y probar su aromático café o la raicilla, destilado de maguey producido artesanalmente. Para comer, Hacienda Matel, en el centro, es buena opción.
Cincuenta kilómetros más adelante, en plena Sierra Madre Occidental, Mascota se caracteriza por su sencillo ambiente provinciano y escenarios naturales como la Laguna de Juanacatlán, la Presa Corrinchis y el Volcán El Molcajete.
No dejes de visitar el pequeño Museo Arqueológico con piezas extraídas de excavaciones locales. Te recomiendo hacer noche aquí: Sierra Lago Resort, a orilla de la laguna, es cómoda alternativa (sierralagoresort.com).
Al día siguiente, continúa el viaje hacia Talpa de Allende, uno de los sitios de peregrinación más célebres de Jalisco en el que se venera a la Virgen del Rosario; aquí vale la pena conocer el Bosque de Maple, los petroglifos de Sacamecate y la Capilla del Mineral del Cuale.
MAZAMITLA-TAPALPA
Ciclismo de montaña, rappel, senderismo y turismo rural, son las opciones que ofrecen estos dos pintorescos lugares.
En Mazamitla, a 130 kilómetros al sur de la capital tapatía, resulta imprescindible conocer las Cascadas El Salto y El Pedregal, el mirador El Tabardillo o el Cerro del Tigre, desde el cual se aprecian fantásticas vistas al Volcán de Fuego y al Nevado de Colima.
Hacia el oeste, a dos horas de Mazamitla, encontrarás Tapalpa, conocido por su tradición artesanal en madera y textiles de lana.
El pueblo despliega su encanto entre montañas, sinuosas calles y paisajes sobrenaturales como Las Piedrotas, en el Valle de Los Enigmas.
Merecen también una visita La Conquista, primera fábrica de papel en Latinoamérica; y, la ex Hacienda La Media Luna. Se afirma que éste fue uno de los escenarios que Juan Rulfo inmortalizó en la novela Pedro Páramo.
Mi sugerencia para hospedarse es Villa Cassis, cálido hotel boutique emplazado en la parte alta de Tapalpa. www.villacassis.com.mx.