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edgar.luna@eluniversal.com.mx
Torreón.— Al acabar el juego ante Rayados, Jonathan Orozco, portero de Santos Laguna, comenzó a levantar, a motivar a sus compañeros y hacer una seña que significaba “allá, en territorio Guerrero, darán vuelta a la eliminatoria”. Orozco nació como guardameta rayado, fue campeón con el equipo regio, pero la vida lo puso en uno de los cuadros que mayor rivalidad tienen con su alma mater, y él no lo niega, tiene mucho cariño por la que aún considera su casa, pero entiende que ahora es “lagunero”.
“Sí, acabamos el primer juego y ya debemos de pensar en la vuelta, estoy seguro que allá en el Corona, le daremos la vuelta. Ya lo hicimos una vez [el torneo pasado ante Tigres], con el marcador de 0-2, ahora sólo fue un gol”.
Y si sólo fue una anotación, fue gracias a la actuación de Jonathan Orozco, quién se creció ante su ex equipo.
“Uno hace su trabajo, así de sencillo, uno está para eso, pero lo que destaco fue la aplicación; todos trabajamos por un bien común”.
Todo lo detuvo el portero santista, sólo le faltó esa chilena de Rogelio Funes Mori, “era imparable, un auténtico golazo, de esos que casi no se ven, de los goles más bonitos del nuevo estadio”.
Un inmueble que simplemente no cree en su equipo, no se llenó, algo que le llamó la atención al guardameta que conoce bien a la afición regia, “es muy extraño ver un juego en Monterrey en el que el estadio no esté lleno, es raro. No sé qué haya pasado, quizá los precios, el horario, no sé... Lo importante para Santos es echar la carne al asador y en nuestra casa con el apoyo de nuestra gente darle vuelta, porque sí se puede ”, concluyó el portero que en la fase regular del Apertura 2018 recibió 12 goles, y ante Rayados, en la jornada 14, se fue en blanco.