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Han pasado dos mil 922 días, ocho años exactos, pero eso no quiere decir que se hayan olvidado aquellas imágenes de los seleccionados mexicanos tendidos sobre el hirviente césped del estadio Castelao, en Fortaleza, con las lágrimas como muestra de su dolor.
Porque el #NoEraPenal resume uno de los capítulos más dolorosos e inolvidables en la historia del futbol mexicano. La Selección Nacional ha avanzado a octavos de final en las más recientes siete ediciones de la Copa del Mundo (sólo Brasil y el Tricolor lo han hecho), pero el equipo nacional siempre se quedó fuera.
Pocas de esas siete eliminaciones tan dolorosa como la del 29 de junio de 2014 frente a Holanda (1-2). El equipo entonces dirigido por Miguel Herrera había hecho una buena Copa del Mundo . Marchaba invicto, producto de victorias sobre Camerún (1-0) y Croacia (3-1), así como un heroico empate contra el anfitrión Brasil (0-0), con Guillermo Ochoa como figura excluyente.
Había mucha ilusión de por fin alcnazar el anhelado quinto partido, la cual se fortaleció con el gol de Giovani dos Santos (48'). El "Piojo" y sus futbolistas parecían destinados a romper esa barrera psicológica, pero en los minutos finales todo se desvaneció.
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Wesley Sneijder igualó a dos minutos del final y entonces llegó la hecatombe, la jugada que dio origen al famoso hashtag #NoEraPenal , memes, playeras y hasta canciones. El arbitro Pedro Proença juzgó como penalti una jugada entre Rafael Márquez y Arjen Robben dentro del área tricolor.
Klaas Jan Huntelaar no lo falló (94') y la Selección Nacional volvió a quedarse en la orilla. Más allá de la polémica jugada, los aficionados mexicanos consideraron que la infracción nunca existió y crearon el #NoEraPenal que todavía lastima sus corazones.