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Para Paola Espinosa , no sucedió nada. La clavadista se fue satisfecha porque cuando terminó su serie de clavados en la final de trampolín tres metros, “muchas clavadistas se me acercaron y me dijeron. ´ Paola eres grande’”.
El no haber conseguido oro en las tres competencias que participó, dos bronces y un noveno sitio fue más que suficiente para la atleta que defendió con todo los criterios de selección que hizo la Federación Mexicana de Natación y que favorecieron a una camarilla.
No acepta que haya sido un fracaso su actuación, pero… “Me hubiera gustado tener un mejor resultado, pero detecté súper bien en que fallé para poderlo mejorarlo. Me deja tranquila que esto haya pasado ahorita, para poder entrenarlo. Fuera de ese clavado (en la segunda ronda donde fue calificada con 1.0 y 2,0) y los estribos que es algo que debo aprender a competir, hice clavados muy buenos, que me hacen sentir bien. Hay detalles que debo seguir trabajando”.
Lo que le deja feliz, es que “muchos se me acercaron y me dijeron ‘ Paola eres grande’”. A instrucción de la encargada de medios de la Federación Mexicana de Natación , habló sobre su peso, el cual no es suficiente para actuar en el trampolín de manera eficiente.
“Debo de estar más pesada. El músculo se me va muy rápido. Es algo que no tiene que ver con mi talento o mi técnica. Es algo que debo de aportarle a mi físico para mover este trampolín, porque me cuesta mucho trabajo… Aun así puedo hacer clavados elegantes y bonitos”.