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Es un deporte de contacto. Quizá el que más contacto tenga. Y el que más daño haga.
Se juega la final la Liga de Futbol Americano de México entre los Gallos Negros de Querétaro y los Fundidores de Monterrey en el estadio Caliente de Tijuana. Y más allá de la rivalidad también están los cuidados a los jugadores y de eso se encargan los que tienen las gorras rojas.
Cada encuentro de la LFA cuenta con un staff médico en cada equipo de cinco a ocho integrantes en campo, más coordinadores médicos LFA y miembros Red Cap Team.
“Somos neurocirujanos que tenemos una gorra roja para que seamos localizables en cualquier lugar de la cancha. No pertenecemos a ningún equipo, pertenecemos a la Liga y nos ocupamos de que se cumpla el protocolo contra conmociones”, explica Gerardo Vázquez jefe del Red Camp Team o los Gorras rojas.
“El tono rojo que utilizamos en las gorras es distinto al que pueden utilizar los equipos en sus uniformes. Desde el inicio de temporada se les deja claro que no deben utilizar un tono igual. Debemos estar bien detectables en el campo”, señala.
Los miembros del Red Cap Team (gorras rojas) “no sólo trabajamos en la LFA, sino damos capacitación a futuros médicos especializados en el deporte”.
