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El conflicto entre barras de Querétaro y Atlas tuvo como resultado 26 personas lesionadas. Marysol —testigo de los hechos— confirma la pasividad con la que actuaron los elementos policiacos.
“Cuando salí, había unas 20 patrullas; dos personas mayores estaban pidiendo a los policías que se metieran al estadio y ellos estaban fumando, hablando por teléfono, y les respondieron que no podían hacer nada porque era propiedad privada”, compartió a EL UNIVERSAL Deportes.
Marysol
acudió a La Corregidora con tres menores de edad, su hijo y dos amigos del adolescente. Sus asientos estaban en la cabecera norte. Comparte que mantuvo la calma al momento del conflicto, pero después llegó un consejo.
“Ellos mismos [elementos de seguridad privada] nos dijeron que nos fuéramos lo más pronto posible, porque la situación lucía algo complicada”, expresó.
Marysol adquirió su bono del Querétaro para esta temporada, había acudido a los otros cuatro juegos como local de los Gallos .
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