Nasville.— Las interminables gotas que caen en la capital de Tennessee provocan que varios gestos tricolores se contraigan, pero hay uno que tiene motivos más profundos que la lluvia para descomponerse totalmente.
Discurso que hace extensivo a sus compañeros, porque la goleada del viernes puede generar cuestionamientos, pero el menor de los Dos Santos pide enterrarlos.
“La gente debe tener calma. Es una Selección que ha cambiado muchísimos, hay nuevas caras, gente joven con ilusión”.
Basa su optimismo en lo mostrado durante algunos lapsos del enfrentamiento con los charrúas.
“En los primeros 25 minutos, el equipo estuvo muy bien”, pondera. “En lo personal, hay balones que no estoy acostumbrado a perder en mediocampo. Acepto que algunos goles [en contra] pudieron llegar porque perdí la pelota, pero estoy acostumbrado a las críticas. Somos humanos y algunas veces nos podemos equivocar”.
Porque él tiene su mente puesta en Qatar 2022. No se quiere bajar.