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Noche de reflexión para Gerardo Martino y los futbolistas de la Selección Nacional.
Noche que no puede repetirse en la Copa Oro, ya que a partir del próximo partido, un descuido o el exceso de confianza significaría la eliminación de un torneo que esta en la lista de los deberes para el 2019. El peor partido de México con el estratega argentino en el cargo. Displicencia en la marca, en la disputa del balón y en la generación de jugadas a la ofensiva.
Tan desesperado llegó a estar el Tata , que de tanto discutir con el árbitro —con quien sacaba parte de su frustración—, el salvadoreño Iván Barton lo amonestó. Fue la primera velada de espanto para el técnico nacional.
El conjunto tricolor no tiene otra cosa que ganar este año y eso incrementa la obligación. Pero además de tener que levantar la copa al final de la competencia, también está la responsabilidad de guardar las formas y, a pesar de la victoria sobre Martinica (2-3), los cuestionamientos sobre la manera del triunfo fueron inevitables.
México
presentó tres cambios en el cuadro titular con el ingreso de Jonathan Orozco en la portería, César Montes en a central y Fernando Navarro en la lateral derecha. En el papel y a pesar de los movimientos, el estratega nacional mantuvo la seriedad a pesar de que ya estar clasificado… pero en la práctica, el equipo pecó de cuidarse demasiado, lo que le generó problemas ante un voluntarioso cuadro caribeño.
Martinica
dio un golpe de realidad al conjunto mexicano a los 56 minutos con el gol en tiro libre de Kevin Parsemain para el 1-1 y después al 84´ con el certero cabezazo de Jordy Delem . Un llamado de atención a los que los tricolores, quienese se fueron al frente en el marcador con tanto de Uriel Antuna al minuto 29. Después cayó en el bostezo de querer aguantar la ventaja sin arriesgarse a una entrada que generara alguna otra lesión. Esto permitió la reacción de los caribeños.
Raúl Jiménez
(61´) y Fernando Navarr o (72´) pusieron el segundo y tercero de México, respectivamente. Hacia el final del juego la tensión aumentó con el segundo gol de Martinica, por una falta de atención.
Primera llamada de atención en la era de Gerardo Martino … la pregunta es: ¿Será la última?
