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Se sabe que el gol es lo que todos los jugadores buscan, hasta sacrificarse por él… hasta pegarse con el poste.
En el gol del empate (50’) entre León y Atlas, Édgar Zaldívar dio el todo por el todo y se lanzó como karateca para contactar el balón y meterlo en la portería, a pesar de que por el vuelo que llevaba se fue a estrellar fuertemente en el poste, el impacto fue grande y ni siquiera festejó.
Fue hasta que se levantó, momentos después, y se metió la pelota en su camiseta, como se celebra cuando se está esperando a un bebé.
Lo malo, es que en Fox Sports, ni siquiera gritaron su anotación. Raúl Orvañanos dijo que la pelota había pegado en la red, pero por afuera.
Minutos y repeticiones después, se dio cuenta de que la pelota entró y gritó el tanto.