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Nashville.— Los Colts de Indianapolis y Titans de Tennessee se juegan el último boleto de comodín de la AFC rumbo a la postemporada, ya que los Texans apuntan a llevarse la división si vencen a Jaguars. El ganador seguirá la próxima semana; el otro, no.
Andrew Luck se apunta para ser nombrado el regreso del año. El quarterback de los Colts volvió de una lesión que lo marginó toda la temporada pasada y ha estado a tope en el camino rumbo a los Playoffs.
El egresado de Stanford acumula 4 mil 308 yardas por pase, 126 por tierra, 36 touchdowns y una efectividad de 67.2 por ciento.
El buen trabajo del pasador ha sido acompañado por el trabajo del head coach Frank Reich, quien llegó para esta campaña después de que Josh McDaniels —coordinador ofensivo de Nueva Inglaterra— rechazara el puesto.
Cuando la carrera de Luck parecía terminarse, Reich dispuso un sistema cómodo para el líder del equipo junto a una defensiva que permite 345 yardas y 22 puntos por encuentro.
Si los Colts estaban en un proceso de transformación, la metamorfosis llegó antes de tiempo.
Las constantes lesiones de Marcus Mariota —en duda para el partido de esta noche— ha impedido un equilibrio en resultados positivos para los Titans.
El corredor Derrick Henry despertó a una ofensiva estancada. En diciembre, ha acarreado para 532 yardas y siete anotaciones.
Tennessee aspira a colarse a la postemporada por segundo año consecutivo, algo que no consiguen desde las temporadas 2007 y 2008.
Para Luck, Reich e Indianapolis, meterse a los Playoffs sería una situación que no estaba contemplada durante el verano.
Enero llegó antes para estas franquicias, que quieren vestirse de comodín.