Más Información
Sheinbaum se reúne con Lemus; “trabajar al estilo jalisco es en coordinación con la federación”, expresa gobernador
Marko Cortés difunde infografía a favor de denominar terroristas a cárteles; el “primer paso es reconocerlo”, dice
Activistas rechazan colocación de cámaras trampa para fauna en Tren Maya; piden retirar mallas metálicas que obstruyen su paso
Revés al INE, juez niega retirar suspensión definitiva a reforma judicial; da 48 horas para acatar sentencia
En entrevista a la afamada revista argentina El Gráfico en el 2019, Diego Cocca habló de la influencia que tiene de Ricardo La Volpe y cómo define al futbolista mexicano.
En entrevista realizada por el periodista Diego Borinsky, Cocca dijo que comenzó a interesarse en ser técnico, cuando formó parte del Atlas al mando de La Volpe.
“Empecé a tomar apuntes en el Atlas con La Volpe, porque el tipo te tiraba una batería de información que no era fácil de digerir así nomás. Fui con 28 años y me encontré con algo nuevo y quise interpretarlo, a buscar el por qué y el para qué, y empecé no solo a tomar apuntes, sino a mover fichas en las canchitas. Ahí le encontré el gustito”.
Pero no por ser admirador de La Volpe, trata a los jugadores igual que él: “Cada uno tiene su manera de ser. Uno tiene muchísimos técnicos en la carrera y los que te dejan cosas de verdad son pocos, y a mí La Volpe me dejó cosas. Ojalá yo pudiera dejar una huella así en los jugadores que dirijo”.
No duda en decir que el 'Bigotón' es uno de los mejores técnicos que ha tenido, “La Volpe me mostró cosas tácticas que no conocía y me encendió el fueguito para ser DT”.
LEE TAMBIÉN: Diego Cocca será el técnico de la Selección Mexicana
Pero el DT argentino que más le gusta, es: “(Gerardo) Martino . Tuve la oportunidad de ir a charlar con él a la AFA hace unos meses y tiene las ideas muy claras”.
Cocca dice ser fiero defensor del futbol mexicano. “A nivel táctico, el futbol mexicano es muy interesante. Saben que no cuentan con el jugador diferente, al revés del argentino, que sí sabe que lo tiene y por eso simplifica dándosela al diferente, porque algo te va a inventar. El mexicano no lo tiene y debe sacar ventaja de otra manera, buscando superioridad numérica, atacando por un lado más que por el otro, analizando más al rival y así fue que empecé a entender un poquito más de táctica”.
Dice que escucha a su jugador: “Siempre estoy abierto a escuchar. Algunas sugerencias las he evaluado y me di cuenta de que podían sumar. Y otras, no. Soy un técnico abierto, siempre que me encuentre con un plantel que sepa cuáles son los límites”.
En alguna ocasión le plantearon: “Marcar en zona porque se sentían más cómodos y seguros, en vez de hacer hombre. Lo practicamos, me gustó, y cambiamos. Siempre damos el espacio para que si hay algo que no les gusta, se pueda decir. Ahora, que me expliquen el por qué y el para qué. Y después veo”.
Sus preceptos básicos como entrenador, son: “La agresividad. Me gusta un equipo que cuando no tiene la pelota sea agresivo para recuperarla, que no espere a que el rival la pierda. Y que cuando la tenga, encuentre el hueco para lastimar, no que la tenga por tener”.
Piensa que los principales atributos de un buen técnico deben ser: “Primero, tener una idea clara de lo que se quiere. Luego, ser transparente, tener amor por este deporte y pensar en lo mejor para el equipo, y no en lo individual”.
Las charlas tácticas con Diego Cocca serán cortas: “No duran más de 10 o 15 minutos porque si no, el jugador se desconcentra. El día anterior muestro imágenes del rival, cómo neutralizarlo, cómo lastimarlo, luego lo trabajamos, y el día del partido, antes de salir para la cancha, repasamos un poco con imágenes, y hago una reflexión final”.
Y lo que menos le gusta de la profesión es: “Ehhh, el periodismo, que es complicado, duro, trata de buscar el quilombo, y eso me obliga a mí a estar todo el tiempo a la defensiva, y no me gusta estar así, pero no me queda otra. Le doy la menor bola posible. Les digo a mis colaboradores que si hablan alguna boludez muy grande, me digan, así lo corto de raíz”.
Se le suele ver bastante tranquilo en el banco: “Porque soy tranquilo y hablamos mucho con el cuerpo técnico: si entendemos que pasa algo, hay que tratar de encontrar los por qué y cambiarlo, no echar la culpa y quedarnos tranquilos con eso”.
Y eso sí, le gusta ir pulcro y arreglado a los partidos: “Siempre fui así, no es que actúo, eh. Si querés ser algo que no sos, se dan cuenta enseguida”.