Tras calificar como normales las fallas de operación que ha tenido el nuevo estadio de los Diablos Rojos, en su primer mes de actividades, el mandamás escarlata , Alfredo Harp Helú descartó que sea un estadio inseguro y que en poco tiempo funcionará sin ningún inconveniente.
Al respecto, Othón Díaz , presidente ejecutivo de la organización lamentó que se destaquen los aspectos negativos del inmueble, pero afirmó que “estamos trabajando para mejorar la problemática que ha enfrentado el estadio en su arranque. Pronto estará todo mejor”.
Cuestionado sobre un posible acercamiento con el gobierno de la Ciudad de México , para hablar sobre el permiso que le fue otorgado a Diablos Rojos por la pasada administración, Harp Helú señaló que están en charlas constantes sobre ese y otros temas.
Asimismo, confirmó que su intención es renovar el permiso que tienen para operar el inmueble por los 30 años estimados.
De vuelta a los temas deportivos, el empresario adelantó que trabajan fuerte para confirmar juegos de Grandes Ligas en el nuevo inmueble, para el próximo año.
“Tenemos por lo menos seis meses para definirlo, porque ellos deben anunciarlo antes. El interés de Grandes Ligas para venir existe”.
