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Sabiendo que la salud tiene como pilares fundamentales a la alimentación y la realización de actividad física, difícilmente se nos ocurra pensar que ciertos alimentos naturales y nutritivos puedan ocasionarnos algún perjuicio. Sin embargo, no todas las personas son iguales ni sus organismos reaccionan de igual manera ante los mismos componentes.
En base a lo señalado, hoy pondremos el alerta en un producto de origen natural que, a pesar de poseer un gran caudal de nutrientes beneficiosos para la salud, puede traer complicaciones a algunas personas. Se trata del ñame, conocido también como batata, boniato o camote, y que no es aconsejado para quienes padecen ciertas enfermedades.
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Consumo de ñame y salud
El ñame es un tubérculo con gran presencia en África, Asia y América y que se destaca por ser un alimento rico en hidratos de carbono, vitaminas A, C y E, b-carotenos, potasio y fósforo, según un informe difundido por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España. Por ello, añade, es un alimento muy eficaz en la lucha contra la desnutrición.
Más allá de lo beneficioso que puede resultar incluirlo en nuestra alimentación, el ñame no es recomendado para algunas personas. La doctora Sruthi M. remarca que algunas personas deberían consumirlo de forma moderada e incluso excluirlo de su dieta para evitar complicaciones en su salud.
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La profesional explica que al ser un alimento rico en carbohidratos las personas con diabetes deberían limitar el consumo de ñame. Además, quienes son tratados por problemas cardiovasculares con medicamentos como los betabloqueantes también pueden complicar su salud al sumar este tubérculo a su alimentación. Esto es por su contenido de potasio que al consumirse junto con los medicamentos señalados incrementa el riesgo de sufrir hipercalemia.
Por otro lado, quienes padecen problemas renales también deberían evitar su consumo ya que estos órganos podrían verse imposibilitados de eliminar todo el potasio aportado. Además, este alimento contiene oxalatos, compuestos que contribuyen con la formación de cálculos renales, por lo que es otro motivo para suspender su consumo. Finalmente, desde el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España recomiendan moderar la cantidad y frecuencia de su consumo en casos de sobrepeso, obesidad o diabetes.
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