La cuenta regresiva ha comenzado. La astronomía vivirá una cita decisiva con el cosmos. El alcanzará su punto más cercano a la Tierra, ofreciendo una ventana irrepetible para observarlo y tratar de descifrar su origen.

El objeto, un viajero que no pertenece a nuestro sistema solar, fue descubierto por el sistema de detección Atlas (Asteroid Terrestrial-impact Last Alert System) y es el tercer visitante interestelar confirmado, después del asteroide ‘Oumuamua y el cometa Borisov. Su nombre refleja esa condición: ‘3I’, por ser el ‘tercero interestelar’.

De acuerdo con los modelos de simulación, se habría formado hace más de diez millones de años en otro sistema planetario y, tras un extenso recorrido por la Vía Láctea, llegó hasta las cercanías del Sol. Pero lo que más ha desconcertado a los astrónomos no es su procedencia, sino su comportamiento.

Lee también

Durante su paso por el perihelio, su punto más cercano al Sol, el 31 de octubre, el cometa duplicó su brillo y adoptó un tono azulado inesperado, un fenómeno que sorprendió incluso a los investigadores más experimentados.

El telescopio espacial Hubble de la NASA capturó esta imagen del cometa el 21 de julio de 2025, cuando se encontraba a 445 millones de kilómetros de la tierra. Foto: NASA, ESA, David Jewitt (UCLA)
El telescopio espacial Hubble de la NASA capturó esta imagen del cometa el 21 de julio de 2025, cuando se encontraba a 445 millones de kilómetros de la tierra. Foto: NASA, ESA, David Jewitt (UCLA)

Según el Dr. Matthew Genge, del Imperial College London, ese color sería el resultado de la liberación de gases desde el interior del núcleo, una especie de ‘erupción cósmica’ que ocurre cuando el hielo se transforma en vapor.

¿Por qué el 19 de diciembre es una fecha clave del Cometa 3I/Atlas?

El 19 de diciembre, 3I/Atlas pasará a unos 270 millones de kilómetros de nuestro planeta, es decir, a 1,8 unidades astronómicas. No representará ningún peligro, pero sí una oportunidad científica única.

Lee también

En ese momento, agencias como la NASA, la ESA y el Observatorio Europeo Austral coordinarán una campaña internacional de observación que se extenderá hasta enero de 2026.

Telescopios en tierra y en el espacio, entre ellos el James Webb y posiblemente el Hubble, apuntarán hacia el objeto para analizar su brillo, su composición química y la forma en que se mueve.

Se espera determinar si su aceleración, detectada por el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la Nasa, responde a causas naturales o si esconde un fenómeno aun no explicado por la física conocida. Esa aceleración no gravitacional, similar a la que mostró ‘Oumuamua en 2017, ha encendido el debate.

Lee también

Algunos científicos, como el astrofísico Avi Loeb, de la Universidad de Harvard, han planteado la posibilidad, aún sin pruebas, de que se trate de un objeto de origen tecnológico o artificial.

Otros, más cautos, sostienen que podría deberse simplemente a la liberación de gases por la desgasificación del cometa. Lo que sí es evidente es que 3I/Atlas no se comporta como los cometas comunes.

Además de su aumento repentino de brillo, los instrumentos espaciales han detectado en su atmósfera niveles anormales de dióxido de carbono y trazas de níquel, una composición poco habitual que podría revelar nuevas claves sobre los procesos de formación planetaria en otros sistemas estelares.

Foto: Captura de pantalla National Geographic.
Foto: Captura de pantalla National Geographic.

Lee también

Una ventana hacia el origen del cosmos

El verdadero valor de este encuentro no está en el espectáculo visual, sino en lo que puede enseñarle a la ciencia. Los cometas interestelares actúan como mensajeros naturales del espacio profundo, fragmentos de mundos desconocidos que viajan durante millones de años hasta llegar a nuestro vecindario solar.

Estudiar su composición permitirá entender cómo nacen y evolucionan los planetas más allá del Sol. Según la profesora Marina Galand, también del Imperial College London, la reciente exposición de capas más profundas del cometa tras su paso por el Sol será clave para analizar cómo cambia su estructura interna con el calor y el tiempo.

A medida que diciembre se acerca, los astrónomos de todo el mundo afinan sus instrumentos para no perderse ni un detalle. La humanidad, una vez más, mira hacia el cielo buscando respuestas.

Quizá el 3I/Atlas no traiga mensajes de otros seres ni señales de tecnología lejana. Pero su paso recordará que cada fragmento de polvo, cada trazo de luz que cruza el espacio, es también una pregunta abierta sobre nuestro lugar en el universo.

*El Grupo de Diarios América (GDA), al cual pertenece EL UNIVERSAL es una red de medios líderes fundada en 1991, que promueve los valores democráticos, la prensa independiente y la libertad de expresión en América Latina a través del periodismo de calidad para nuestras audiencias.

También te interesará:

¡EL UNIVERSAL ya está en Whatsapp!, desde tu dispositivo móvil entérate de las noticias más relevantes del día, artículos de opinión, entretenimiento, tendencias y más.

xmg

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses

[Publicidad]