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Las festividades, los cambios en la dieta o simplemente un estilo de vida ajetreado pueden afectar nuestra digestión. Una solución sencilla y efectiva para aliviar estos problemas es el yoga. Con posturas accesibles que puedes realizar desde casa, no solo ayudarás a tu sistema digestivo, sino que también fortalecerás tu abdomen y reducirás tensiones acumuladas.
Acá junto a los expertos de Vitónica te presentamos tres posturas de yoga diseñadas para mejorar la digestión y que son ideales para principiantes:
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Torsión sentada
Esta postura ayuda a masajear los órganos internos, estimula el flujo sanguíneo en la zona abdominal y mejora el tránsito intestinal.
Cómo hacerla:
- Siéntate en el suelo con la espalda recta y las piernas extendidas.
- Cruza la pierna derecha sobre la izquierda, flexionando la rodilla.
- Coloca el brazo izquierdo alrededor de la rodilla derecha y apoya la mano derecha detrás de tu espalda.
- Gira el torso hacia la derecha y mantén la postura durante 5 respiraciones profundas.
- Cambia de lado y repite.
Ángulo lateral en torsión
Esta postura fortalece el abdomen, mejora la movilidad del torso y estimula los órganos digestivos.
Cómo hacerla:
- Empieza en la postura del guerrero II, con la pierna derecha hacia adelante y la izquierda extendida hacia atrás.
- Baja la rodilla izquierda al suelo.
- Gira el torso hacia la pierna derecha, colocando el codo izquierdo sobre la rodilla derecha para apoyarte.
- Extiende el brazo derecho hacia arriba o alarga ambos brazos hacia adelante.
- Mantén la posición durante 5 respiraciones y repite con la otra pierna.
Postura rodilla al pecho
Perfecta para aliviar la pesadez estomacal y liberar tensiones en la zona lumbar, esta postura es relajante y muy eficaz.
Cómo hacerla:
- Acuéstate boca arriba en tu mat.
- Dobla las rodillas y llévalas hacia el pecho, rodeándolas con los brazos.
- Mantén la postura mientras respiras profundamente durante 30 segundos.
- Puedes balancearte suavemente de un lado a otro para masajear la espalda baja.
Estas posturas de Yoga no requieren experiencia previa ni equipo especial, por lo que puedes integrarlas fácilmente a tu rutina diaria. Realizarlas después de una comida pesada o como parte de tu práctica matutina no solo contribuirá a una mejor digestión, sino que también te brindará una sensación de calma y bienestar general.
