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Cuando pensamos en queso, es común asociarlo con una experiencia gastronómica deliciosa, pero también con preocupaciones sobre su contenido en grasas y calorías.
Sin embargo, hay un tipo de queso que no solo satisface el paladar, sino que además es beneficioso para la salud ósea: el queso Jarlsberg. Este queso, originario de Noruega, ha captado la atención de los expertos en salud por su capacidad para fortalecer los huesos sin elevar el colesterol.
¿Por qué es importante el queso en nuestra dieta?
El queso es un alimento que ha acompañado a la humanidad durante miles de años, y su elaboración a partir de la leche lo convierte en una fuente rica en nutrientes esenciales. Aporta vitaminas, minerales y proteínas de alto valor biológico, incluyendo calcio, fósforo, magnesio y vitamina D, todos ellos fundamentales para mantener la salud ósea. Aunque se ha ganado una mala reputación por su contenido en grasas saturadas y calorías, no todos los quesos son iguales en cuanto a su impacto en la salud.
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¿Qué hace al queso Jarlsberg especial para los huesos?
Un estudio publicado en la revista BMJ Nutrition Prevention & Health ha revelado que el queso Jarlsberg podría ser un aliado excepcional para nuestros huesos. Este queso, al ser consumido en pequeñas porciones diarias de 57 gramos, ha demostrado aumentar los niveles de osteocalcina, una hormona vital para la formación y fortaleza de los huesos y dientes. Además, lo más interesante es que este beneficio se obtiene sin que se eleve el colesterol LDL, conocido como "colesterol malo", lo que lo convierte en una opción segura para la salud cardiovascular.
Los investigadores encontraron que el consumo regular de queso Jarlsberg no solo mejora la densidad ósea, sino que también incrementa los niveles de vitamina K2 y otros biomarcadores óseos, cruciales en la formación de hueso nuevo. Además, observaron una reducción en los niveles de calcio y magnesio en la sangre, lo que sugiere una mayor absorción de estos minerales en los huesos, potenciando su fortaleza.
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¿Qué más aporta el queso Jarlsberg?
Este queso también contiene la bacteria Propionibacterium freudenreichii, que produce una sustancia llamada DHNA. Esta sustancia ha sido relacionada con una mejor salud ósea y un aumento en la producción de osteocalcina, lo que sugiere que el queso Jarlsberg no solo contribuye a mantener los huesos fuertes, sino que también podría prevenir condiciones como la osteopenia y la osteoporosis.
¿Cómo es el queso Jarlsberg y cuál es su origen?
El queso Jarlsberg, aunque originario de Noruega, a menudo se comercializa como un queso suizo debido a sus similitudes con el Emmental. Tiene una textura semiblanda, con pequeños orificios y un sabor suave que recuerda a las nueces. Su corteza natural de color amarillo protege un interior dorado que ha conquistado a los paladares de todo el mundo.
Este queso fue creado originalmente en el siglo XIX por Anders Larsen Bakke, un pionero en la producción de lácteos en Noruega. Aunque Bakke falleció en 1899, la receta fue redescubierta y perfeccionada a mediados del siglo XX por el agrónomo Ola Martin Ystgaard, quien relanzó el Jarlsberg en 1960. Desde entonces, se ha convertido en un símbolo nacional y en uno de los productos más exportados de Noruega.
