Al cuidar nuestra piel resulta por demás indispensable incentivar la producción de colágeno en nuestro cuerpo. Otra alternativa es sumarlo con algún compuesto industrializado o de forma natural con preparados que podemos hacer en nuestro hogar y así obtener beneficios con un bajo presupuesto.
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Sucede que, a partir de los 18 años, el cuerpo humano disminuye su producción de colágeno en un 1.5% anual, lo que puede resultar en la aparición prematura de signos de envejecimiento. Es por ello que te proponemos una alternativa que te ayudará a eliminar 20 años de daño de tu piel y que lo puedes hacer utilizando semillas de girasol.
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Cómo obtener colágeno de la semilla de girasol
Las semillas de girasol son una fuente abundante de nutrientes con diversos beneficios para la salud que incluyen ácidos grasos omega 3 que reducen el riesgo de enfermedades cardíacas, vitamina E que protege la piel del daño solar y estimula la producción de colágeno, el zinc que contribuye a mantener un cabello saludable, la fibra para regular el tránsito intestinal y el magnesio para mantener nuestros huesos fuertes.
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La receta para hacer este colágeno con semillas de girasol incluye un poco de aceite de oliva, una cucharada de pimienta, una cucharada de pimentón, una cucharada de cúrcuma y un puñado de semillas de girasol.
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Ahora, tienes que mezclar en un recipiente el aceite de oliva, la pimienta, el pimentón y la cúrcuma. Luego, tienes que añadirle las semillas de girasol y revolverlo bien. Esas semillas las debes tostar en una sartén durante unos 3 minutos y luego guardarlas en un frasco de vidrio y consumirlas entre tus comidas. De esta manera estarás aportándole a tu piel colágeno natural, aunque debes tener cuidado porque son calóricas y podrían interferir de manera negativa si estás llevando a cabo alguna dieta en particular.