Tras la toma violenta del Capitolio en Estados Unidos , el pasado 6 de enero, el entonces presidente Donald Trump , publicó, en sus perfiles de Facebook , Twitter y YouTube , un video en el que aseguró que las elecciones fueron fraudulentas, además, aunque pidió a los manifestantes irse a casa, también los calificó como “personas especiales”. Todo ello llevó a las redes sociales a bloquear las cuentas del mandatario por considerar que estaba incitando a la violencia.
En el caso particular de Facebook e Instagram , desde el 7 de enero los perfiles de Trump fueron bloqueados de forma indefinida, y al menos hasta que Joe Biden tomara posesión el 20 de enero. En ese momento el CEO de Facebook, Mark Zuckerberg, declaró: “Creemos que los riesgos de permitir que el Presidente siga utilizando nuestro servicio durante este periodo son simplemente demasiado grandes”.
Ahora que Joe Biden se ha convertido en el presidente de Estados Unidos, las cuentas de Trump podría ser retablecidas, Sin embargo, Nick Clegg, Vicepresidente de Asuntos Globales y Comunicación de Facebook, explicó que l a compañía remitió el caso al Consejo Asesor de Contenidos el cual fue creado el año pasado para tener la palabra final en algunas de las decisiones más difíciles.
El consejo está integrado por expertos y líderes civiles de todo el mundo que, como una entidad independiente cuyas decisiones no pueden ser revertidas por Mark Zuckerberg ni por ninguna otra persona en Facebook, tendrán la tarea de decidir si los perfiles de Donald Trump son eliminados de manera permanente.
“Creemos que nuestra decisión fue necesaria y correcta. Debido a su importancia, consideramos que es importante que el Consejo revise y juzgue de forma independiente si debe ser confirmada. Mientras aguardamos esta decisión, el acceso de Trump a nuestros servicios continuará suspendido de forma indefinida”, señaló Clegg en el blog de la empresa.
Agregó que Facebook está abierto a cualquier observación o recomendación del Consejo sobre la suspensión de cuentas de líderes políticos.
Y aclaró: “Nuestra decisión de suspender el acceso del entonces presidente Trump fue tomada bajo circunstancias extraordinariamente excepcionales: un mandatario de Estados Unidos fomentando activamente una insurgencia violenta diseñada para impedir la transición pacífica del poder. Cinco personas murieron y los legisladores fueron obligados a evacuar la sede de la democracia. Esto no ocurrió nunca antes y esperamos que nunca vuelva a ocurrir. Fue una serie de eventos sin precedentes, que demandó acciones sin precedentes”.
Reacciones
Facebook es consciente de que su decisión ha despertado un debate sobre el poder de las redes sociales respecto al contenido que puede o no distribuirse en internet pues, mientras algunas personas opinan que Facebook debería haber prohibido al presidente Trump mucho tiempo atrás y que la violencia en el Capitolio fue en parte producto de los medios sociales; otros creen que el bloqueo de las cuentas del presidente fue una muestra inaceptable del poder corporativo.
“La reacción a nuestras acciones muestra el delicado equilibrio que está siendo exigido a las compañías privadas”, expresó Clegg. “Nuestra visión es que en las democracias abiertas las personas tienen derecho a escuchar lo que sus políticos están diciendo -lo bueno, lo malo y lo feo- para que éstos sean responsabilizados. Pero eso nunca significó que pudieran decir lo que les dé la gana. Continúan sujetos a nuestras políticas que prohíben el uso de nuestra plataforma para incitar a la violencia. Y esas fueron las políticas que fueron aplicadas cuando tomamos la decisión de suspender el acceso del presidente Trump”.
Así, considerado que muchas personas se sienten incómodas con la idea de que empresas de tecnología tengan el poder de decidir el tipo de contenido que es permitido o prohibido en las redes sociales, aunque se basen en las Normas Comunitarias, Facebook optó por dejar algunos casos en manos de su Consejo
Asesor, “la primera entidad de este tipo en el mundo: una organización independiente liderada por expertos con el poder de imponer decisiones vinculantes a una compañía privada de redes sociales”.
Cabe señalar que el propio Trump, a través de sus administradores de páginas designados, tendrá la capacidad de presentar una declaración a la Junta . También podrán hacerlo individuos y organizaciones que compartan sus ideas mediante comentarios públicos.
Los estatutos de la junta establecen un límite de 90 días como plazo para tomar una decisión. Después de su publicación en su página de internet, Facebook tendrá hasta siete días para aplicar la decisión del caso.