Culpar al neoliberalismo en un caso tan concreto es equivalente a lavarse las manos. AMLO prefiere sonreír y no decir siquiera su nombre (“el caso lamentable de la niña”). Se llamaba Fátima. Háganse cargo, ahora son gobierno, escribe Solange Márquez, articulista de esta casa editorial

Desde que llegó al poder en 1999, Putin ha permanecido como el hombre más fuerte de Rusia. Hoy con 67 años, parece que el ex integrante del FSB está dispuesto a permanecer ahí por varios años más