Quizás alguno de los sesudos intelectuales que rodean a la presidentA podría explicarle la palabra “potencia”. Por ejemplo, declarar ufanamente que México es una “potencia cultural” es algo ofensivo, y hasta clasista y racista

Paz concluyó: “Estoy convencido de que nuestro destino y el de Estados Unidos está ligado por la geografía y por la historia. Yo siempre he sido partidario de la integración”