Los jóvenes de finales de los años 60 y principios de los 70 buscaban la libertad a través de su ropa. La industria de la moda, inspirada en los avances tecnológicos, lanzaba con gran aceptación minifaldas, pelucas y largas pestañas postizas para ellas. Daba igual que ellos lucieran cabello largo y ellas corto, lo mismo pasaba con los zapatos de plataforma y los pantalones acampanados. El mundo estaba cambiando

La manera de crear y consumir moda ha cambiado. Y Jonathan Morales, director creativo de No Name Studio, es uno de los diseñadores que impulsa esta transformación, rompiendo paradigmas y demostrando al mundo que en México hay talento de sobra