En la realidad burocrática los cambios más efectivos se logran cuando se enfocan en la revisión de procesos y procedimientos, no en la modificación de estructuras y organigramas

Un presidente con claridad de rumbo, voluntad de cambio y rodeado de gente capaz sin duda es una buena noticia. El problema aparecerá al intentar implementar los programas con una burocracia desanimada