Los bosques no tienen quién los proteja en nuestro país. Tanto al Reglamento de Bosques de 1894, hasta la Ley Forestal de 1926 y sus actualizaciones les ha faltado severidad y cumplimiento. Con ello se ha buscado “la conservación perpetua de los recursos forestales”, pero la realidad es que nada detiene la tala clandestina

En febrero de 1922 se celebró El Día del árbol, la idea era transmitir a los niños el amor hacia estos gigantes y hacerlos conscientes del beneficio que representan para la “higienización y embellecimiento” de la capital. Numerosos escolares participaron en diversas ceremonias de plantación, pero aquel año se pretendió que el festejo fuera memorable dedicando un árbol a cada periodista muerto

Como cada abril y mayo, lo que queda del bosque de La Primavera, en Guadalajara, y otros bosques... se suceden incendios que reducen a cenizas sus raíces