María Moliner empezó su labor en sus horas de ocio, armada con su pluma Mont Blanc y su máquina de escribir Olivetti Pluma 22. El resultado fue el Diccionario de uso del español
Colín era sobre todo un abogado comprometido con la rehabilitación, el tejido social y la educación.
Con el gobierno de Ernesto P. Uruchurtu, los cabarets, como Los Globos, y la época áurea de esa vida nocturna tenían los días contados
“Ireneo Paz es el gran empresario cultural del XIX”, Ángel Gilberto Adame, escritor e historiador
Adame recupera en un libro la vida y obra del abuelo de Octavio Paz, un liberal que estaba en el olvido, y habla del archivo del Nobel
Un artista que se balancea entre la abstracción y la figuración, un creador de la forma pura, pero también de la historia, del lenguaje y de la figura humana.
Una candidatura ciudadana, libre de la influencia del inoperante mandatario mexiquense, hubiera gozado de mayor libertad para realizar una campaña frontal de confrontación, cosa que no sucedió con Del Moral.
A mediados de 1913 habría de publicar La defensa social: Historia de la campaña de la División del Norte, un texto por demás olvidado, ni siquiera compila-do en sus obras completas.
La guerra de Tablada y de muchos otros intelectuales en contra del maderismo se basaba en convencer al público de que el movimiento pre-revolucionario era sólo una moda pasajera
El fin de Marie José
Tras la muerte de Octavio Paz, Marie José se enfrentó a la gestión del legado del Nobel mexicano. Si bien ella no dejó testamento, su silencio podría significar un mensaje más claro del que se pensaba.
En mi trato personal con Marie José, ella me narró una anécdota en la que Elena Paz Garro entró furtivamente (con detalle me contó que se brincó una cerca) a la casa en Denver para encararla.