El pasado martes 7 de enero, el líder socialista Pedro Sánchez Pérez-Castrejón logró la investidura como presidente de España luego de que el pleno del Congreso de los diputados, con 167 votos a favor, 165 votos en contra y 18 abstenciones, 13 del partido Esquerra Republicana de Catalunya y 5 de EH Bildu, obtuvo lo que parecía imposible.
A través de una coalición de izquierda, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) junto con el Partido Unidas Podemos deberá de gobernar en coalición, lo que no había ocurrido en ese país desde la guerra civil.
Sólo 2 votos marcaron la diferencia, Pedro Sánchez logró su cometido, ser el presidente de España después de 500 días de gobierno interino y de dos elecciones generales efectuadas en abril y noviembre de 2019, en las cuales los socialistas ganaron, pero sin conseguir la mayoría parlamentaria necesaria para formar un gobierno.
Dichas elecciones dejaron varios heridos de muerte política como el líder de Ciudadanos, Albert Rivera Díaz, que tuvo una estrepitosa caída en la última elección de noviembre, como la que tuvo el Partido Popular en abril de ese mismo año, que de alguna manera logró sobreponerse pasándole al líder de Ciudadanos el derrumbe electoral.
Uno de los grandes ganadores de la investidura es el líder del partido de izquierda Unidas Podemos, Pablo Iglesias, quien ejercerá una de las vicepresidencias. Inició con la plataforma política llamada Podemos que obtuvo un millón doscientos cuarenta y cinco mil novecientos cuarenta y ocho votos en las elecciones del Parlamento Europeo el pasado 25 de mayo de 2014, convirtiéndose en una figura política.
Pedro Sánchez se había negado a pactar con Unidas Podemos hasta esta última ocasión, y no solo eso, sino que también existen otros acuerdos con fuerzas políticas que han sido polémicas y de un gran debate en la política española.
En efecto, me refiero a los acuerdos de abstención con el partido catalán Esquerra Republicana, uno de los grupos que aspiran a la independencia de Cataluña y tiene 13 escaños. Para algunas voces son partidos que quieren fragmentar a España. Con el otro pacto con Euskal Herria Bildu quien tiene 5 posiciones o asientos en el Congreso, se logró las dieciocho abstenciones.
Sánchez pactó con los independentistas, lo que actualiza que en el mundo de la política todo es posible; sólo lo que hoy está escrito es el Real Decreto por lo que el Rey de España, Felipe VI, firmó el nombramiento como presidente del gobierno a Pedro Sánchez Pérez-Castrejón, quien juró ante el Rey y ante la Constitución española cumplir con las leyes de su país.
Por ello, vale la pena recordar a uno de los grandes genios de la política, Nicolás Maquiavelo, con una de sus frases célebres “el fin justifica los medios” el fin sería la investidura, los medios el pacto con los independentistas, así se firma el gran decreto de la política: Maquiavelo.
Abogado y activista, maestro en Ciencias Penales. @UlrichRichterM