Hoy lo que menos existe en la política es la congruencia. El Diccionario Esencial de la Lengua Española la define como: “la armonía y el balance que existe entre nuestros pensamientos, emociones y acciones, donde nuestras acciones son un reflejo de nuestros pensamientos y emociones, con un elemento importante adicional de conciencia”.
En efecto, algunos políticos han dejado a un lado sus principios, ya que los usan como moneda de cambio, por un puesto político, por una prebenda política, o una agenda; así de fácil sepultan sus ideales.
En estos tiempos donde lo único que se busca es un hueso o cargo en la política, pocos son los políticos que anteponen sus principios. El ejemplo más reciente de ello lo tenemos con la jurista, ministra en retiro y senadora de la República, Olga Sánchez Cordero, quién en su posicionamiento en el polémico tema de la extinción de los fideicomisos del Poder Judicial de la Federación, expresó: “la posibilidad de que los Poderes de la Unión (Ejecutivo y Legislativo), se coaliguen para intervenir directamente en la administración interna de un tercer Poder (Judicial), no es un ejercicio republicano”. Y en su cuenta de Twitter (o si gustas, X) expresó: “hay momentos en la vida de las personas que son definitorios, para mí, uno de esos momentos es hoy. Como Senadora de la República votaré en contra de que desaparezcan estos fideicomisos”.
“Pido reconsiderar los siguientes instrumentos: Fideicomiso para el Desarrollo de Infraestructura que Implementa las Reformas Constitucionales en Materia de Justicia Federal, Fideicomiso para la casa habitación de personas juzgadoras cuando son reubicadas a zonas de alto riesgo”, “Fideicomiso de Pensiones Complementarias de Magistradas y Jueces jubilados y Fideicomisos de Apoyos Médicos y de Apoyo Económico Extraordinario para Servidores Públicos del PJF, el cual está integrado por recursos propios de las y los trabajadores para situaciones de emergencia.” “Defender estos fideicomisos, adicionales al Fondo de Apoyo a la Administración Pública, es un tema de justicia, como también es un tema de justicia hacer un llamado al Poder Judicial, a que sus criterios valoren siempre los derechos de la ciudadanía y el progreso de la nación”. “Debemos defender al poder judicial, pero también el Poder Judicial debe cambiar algunas cosas para responder a la exigencia de justicia que tiene el pueblo de México”. “Hoy vengo a defender a los trabajadores del PJF, ante la posible eliminación de los fideicomisos que forman parte de sus conquistas laborales. Que quede claro, no he venido a proteger algún tema particular para quienes integran o tuvimos el honor de integrar el pleno de la SCJN; son oficiales, secretarios de tribunales y juzgados, jueces, magistrados y defensores públicos, un total de 46 mil 931 trabajadores, capital humano altamente especializado, al que afectaremos gravemente si en el Senado desaparecemos todos los fideicomisos que administra el PJF”.
La jurista ratificó sus principios republicanos de la división de poderes y vale la pena puntualizar que éstos son componentes esenciales del pensamiento político occidental y han ido de la mano por la conquista de los derechos ciudadanos. No solo eso, una de las características del republicanismo es la virtud cívica, mismo que se ha venido desdibujando en el tiempo.
Quentin Robert Duthie Skinner, autor clásico del republicanismo nos comenta: “una República que se autogobierna solo puede perdurar si sus ciudadanos cultivan esa cualidad decisiva a la cuál Cicerón llamó virtus [...]”, la virtud tiene que ver con los buenos hábitos de la conducta y éstos reflejan características de las personas”.
Doña Olga sacó su virtud cívica o vocación pública, lo cuál debería ser una práctica cotidiana de los políticos y de los ciudadanos, es decir de todos.
La senadora dio una cátedra política que ya no se ve en estos tiempos. Por el contrario, lo que se busca es el poder a costa de los principios, por decir lo menos.
Así que el inquilino de la Suprema Corte de Justicia de la Nación salió del Zócalo al recinto del Senado con la exsecretaria de Gobernación y plasmó el espíritu republicano, me refiero a Montesquieu. Y no debe olvidarse que en Palacio Nacional se encuentra otro ocupante Republicano cuya frase célebre sobre el respeto al derecho ajeno está grabada en letras doradas en el Congreso de la Unión, y que bien podría trasladarse sobre el respeto a la división de poderes; me refiero al Benemérito de las Américas: Benito Juárez.
Enhorabuena por Doña Olga que subió el debate político republicano que tanto ha costado y que tanta falta hace a nuestra clase política.