Cada mañana cientos de familias enfrentan el día con la pesada carga del desconocimiento y la incertidumbre sobre el paradero de sus seres queridos desaparecidos. Estas familias despiertan cada día con la esperanza de encontrar algún indicio que les lleve hasta la persona que un día desapareció. En la Fiscalía de la Ciudad reconocemos como una de nuestras más altas prioridades la labor de asegurar que cada ausencia sea tratada con la urgencia y seriedad que merece.
Las desapariciones se pueden clasificar en tres tipos principales: involuntarias, voluntarias y forzadas. Cada una tiene características distintas y presenta desafíos específicos para las familias afectadas y la sociedad en general. Por ejemplo, una desaparición involuntaria puede ocurrir durante un accidente vial, generando preocupación e incertidumbre entre los familiares, aunque no implica un acto criminal. A veces, también son resultado de la decisión personal de alejarse debido a conflictos o presiones, causando dolor y desasosiego en sus seres queridos. Por su parte, las desapariciones forzadas involucran la participación de grupos delictivos que ocultan el paradero de las personas, violando gravemente los derechos humanos y desafiando la legalidad y justicia.
Respecto al marco legal podemos enunciar tratados como la Convención Internacional para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas, nuestra propia Constitución y el Código Nacional de Procedimientos Penales, así como la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición Cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas. En la Ciudad de México también contamos con la Ley de Desaparición Forzada de Personas y Desaparición Cometida por Particulares para la Ciudad de México, la Comisión de Búsqueda de la CDMX que funciona en estrecha colaboración con la Comisión Nacional de Búsqueda y el Protocolo de Actuación para la Búsqueda de Personas Desaparecidas y No Localizadas, todo lo cual ofrece un enfoque integral hacia los Derechos Humanos de las personas desaparecidas y sus familiares.
Frente a esta situación, el gobierno de México ha demostrado un compromiso renovado y fortalecido que se refleja claramente en la evolución presupuestal destinada a este ámbito, pasando de 6.8 millones de pesos asignados a la búsqueda de personas desaparecidas en 2018 a 1,097 millones en 2023. Un incremento de 16 mil por ciento, indicativo de la prioridad que se le ha dado a este tema crítico dentro de la agenda nacional. Esta decisión de aumentar el presupuesto no solo refleja un cambio en la política pública, sino también un cambio cultural dentro de las instituciones del estado, que ahora reconocen la magnitud de este problema.
La efectividad en la búsqueda y localización de personas desaparecidas depende en gran medida de la coordinación y colaboración entre diversas instituciones. En México, esta coordinación se ha fortalecido significativamente a través de la integración de esfuerzos entre la Comisión Nacional de Búsqueda, las Comisiones de Búsqueda estatales, las Fiscalías estatales.
Desde la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, enfrentamos estos retos mediante acciones de búsqueda, investigación y procuración de justicia para las víctimas y sus familias. El resultado de estas acciones ha sido significativo: hemos alcanzado una reducción en el número de casos de desapariciones no resueltas y un aumento en la capacidad de respuesta rápida y efectiva. Este enfoque sistemático y coordinado es un ejemplo de cómo la aplicación de protocolos claros y la inversión en capacitación y tecnología pueden hacer una diferencia sustancial en la gestión de crisis humanitarias como las desapariciones.
Hoy la eficacia en la búsqueda de personas desaparecidas depende de un incremento en nuestra rapidez de la respuesta inicial y el esfuerzo de unidades de investigación y respuesta rápida que trabajan de manera coordinada, utilizando tecnología avanzada y recolectando información vital de familiares y testigos. También gracias al uso de sistemas de información geográfica y cámaras de seguridad para realizar seguimientos exhaustivos, complementado con la difusión inmediata de alertas a través de medios de comunicación y redes sociales para sumar la colaboración ciudadana.
Y el dato más importante, afortunadamente en la Ciudad de México más del 90 por ciento de los casos no ha tenido relación con la comisión de un delito.
Enfrentar las desapariciones en nuestra ciudad, también ha significado retos como la rotación de personal en unidades especializadas, lo que puede impactar la continuidad de las investigaciones. Para mitigar esto, hemos establecido programas de capacitación continua y mejorado nuestras infraestructuras tecnológicas, lo que facilita una gestión más eficaz y coordinada de los casos.
La prevención de las desapariciones es fundamental y más cuando hacemos referencia a la desaparición de mujeres jóvenes y adolescentes, por ser la población con más alta prevalencia. Ante ello, desde la Fiscalía recordamos a todas las familias la importancia de la educación en seguridad personal y el uso efectivo de la tecnología para mantener seguras a sus familiares y amistades, al mismo tiempo que instamos a las jóvenes y a sus familias a utilizar aplicaciones que permitan compartir su ubicación en tiempo real con personas de confianza.
En la Fiscalía estamos profundamente comprometidos con la búsqueda y localización de cada persona desaparecida. Reconocemos que detrás de cada caso hay una familia esperando y una comunidad afectada. Asumimos con la máxima seriedad nuestra responsabilidad de responder con acciones efectivas y respetuosas, siempre poniendo la dignidad humana en el centro de nuestro trabajo. Nos guiamos por el principio de que ninguna persona debe convertirse en una estadística más. Cada denuncia activa nuestros protocolos de búsqueda inmediata, asegurando que todos los recursos disponibles se movilicen con el objetivo de dar respuestas claras a las familias afectadas. Además, en colaboración con la sociedad civil y otras instituciones, reforzamos constantemente nuestras estrategias para ser más efectivos en nuestra labor. Estamos decididos a no detenernos hasta que cada persona desaparecida sea encontrada y cada caso, resuelto. Nos mantenemos firmes en nuestro compromiso de proteger a todos la ciudadanía y garantizar la justicia en nuestra ciudad.