La violencia política de género está hoy en el centro de la polémica a partir de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, consideró que en cuatro conferencias mañaneras el presidente López Obrador emitió expresiones que constituyen este tipo de violencia en contra de Xóchitl Gálvez.
El presidente aseguró que se trata de una calumnia y que los magistrados alteraron sus expresiones. Recordó además que él mismo es también víctima de violencia política. “¿Todo lo que me dicen a mí no hay violación de género? ¿O el género es nada más femenino?”, dijo el miércoles pasado.
De acuerdo con el Protocolo del INE para la Atención de la Violencia Política contra las mujeres en razón de género, está falta comprende “todas aquellas acciones u omisiones de personas, servidoras o servidores públicos que se dirigen a una mujer por ser mujer (en razón de género), tienen un impacto diferenciado en ellas o les afectan desproporcionadamente, con el objeto o resultado de menoscabar o anular sus derechos político-electorales, incluyendo el ejercicio del cargo. La violencia política contra las mujeres puede incluir, entre otras, violencia física, psicológica, simbólica, sexual, patrimonial, económica o feminicida.”
Lamentablemente en México tenemos muy graves niveles de violencia e impunidad y las mujeres somos especialmente vulnerables. Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, más de 67 mil mujeres fueron víctimas de lesiones dolosas en 2022. De hecho, el año pasado la violencia de género llegó a su cifra más alta.
De acuerdo a la Red Nosotras Tenemos Otros Datos, la violencia familiar en México supera cualquier cifra mundial, con siete de cada 10 hogares con esta problemática. En cuanto a violencia sexual, según el INEGI, en 2021 se cometieron 1.7 millones de delitos contra mujeres que van desde el acoso hasta la violación.
La violencia verbal es más difícil de medir. Sin embargo, en las redes sociales sí se puede acceder a cifras y pueden también hacerse estudios cualitativos. Estos arrojan que las expresiones en contra de mujeres son especialmente agresivas y hasta obscenas.
Si hablamos del ámbito político, las mujeres reciben agresiones distintas a las dirigidas a los varones. Suele haber burlas por su aspecto físico, referencias sexuales denigrantes y hasta amenazas. Ninguna se salva; no importan ni el partido ni el cargo. De acuerdo a una búsqueda en Google, Claudia Sheinbaum aparece ligada a expresiones hostiles en más 246 mil ocasiones, mientras que Xóchitl Gálvez aparece poco más de 43 mil veces vinculada a palabras altisonantes o despectivas en la red.
La coyuntura electoral divide, pero en este esfuerzo por proteger a las mujeres tenemos que estar unidos. En un país con once feminicidios en promedio al día, frenar la violencia de género tiene que estar por encima de intereses políticos.