A efecto de atender las necesidades de las mexicanas y mexicanos repatriados de Estados Unidos y recibirlos de forma humana y cálida, la presidenta de México impulsa la Estrategia Efectiva de Recepción, MÉXICO TE ABRAZA. Un Plan integral en el que participará todo el gobierno federal con el objetivo de posibilitar su acceso a los programas de bienestar, becas educativas, servicios de salud, transporte a sus lugares de origen, acceso a comunicaciones telefónicas e internet, integración a programas laborales, facilidades para obtener documentación, entre otros beneficios.
Estas acciones se suman al Programa de Apoyo para las y los Mexicanos en EU que prevé el fortalecimiento de los 53 consulados; la puesta en marcha del Centro de Información y Asistencia a Personas Mexicanas (CIAM), para brindar apoyo legal vía telefónica; el Botón de Alerta, para casos de emergencia; y la Ventanilla Única de Trámites Consulares.
La doctora Claudia Sheinbaum Pardo ha defendido con valor, contundencia y claridad la soberanía nacional y los derechos de nuestros connacionales en el país vecino. Ha sido enfática en la importancia del trabajo y el pago de impuestos de nuestras hermanas y hermanos migrantes en el exterior, así como de las aportaciones culturales, humanas y sociales.
El gobierno de México está listo para recibir a quienes retornan, no solo porque se han instrumentado acciones específicas que atienden la coyuntura de la toma de protesta del presidente Donald Trump, sino porque nuestro país hoy tiene mejores condiciones económicas para recibir a los que en años anteriores dejaron el territorio nacional en busca del sueño americano.
La estabilidad de las finanzas públicas, la universalización de los programas sociales, el desarrollo de infraestructura, las becas para todos los niveles educativos, la fortaleza del peso frente al dólar, la recuperación del salario mínimo, la significativa reducción de la brecha de la desigualdad y la confianza que han mostrado los inversionistas extranjeros, así como diversos factores que obran a favor de nuestro país, permiten ofrecer posibilidades reales de bienestar, oportunidades para el progreso, así como el ejercicio pleno de derechos humanos y fundamentales.
No queda duda de que también seguiremos siendo una nación solidaria con las personas migrantes de Centroamérica, Sudamérica y el Caribe y, en general, con quienes han tenido que abandonar su país de origen por causas ajenas a su voluntad. El fenómeno migratorio lo hemos entendido y atendido desde los valores y principios del Humanismo Mexicano.
Las personas no lo son por su estatus migratorio, sino por su propia naturaleza y dignidad; sin embargo, este entendimiento no existe en el modelo neoliberal, donde todo, absolutamente todo, se reduce a lo que dictan los mercados. Las guerras son en realidad luchas comerciales, encarnizadas y declaradas como tales, en las que personas y derechos son vulnerados.
El retorno a México de las personas migrantes, debido a deportaciones masivas, no hacen sino avivar los cuestionamientos a ese modelo, que debería de poner en el centro de las políticas y del quehacer gubernamental a los seres humanos y reconocer su fuerza y aporte económico, social, cultural e incluso político. El consenso hoy a nivel global es por un nuevo neoliberalismo con rostro humano.
Los escenarios se leen desalentadores ante una política migratoria con las características que se han anunciado, porque de una u otra manera en América, del sur a norte, todos perdemos.
Unidad nacional y fraternidad internacional, tomando decisiones con la cabeza fría, como lo ha anunciado la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, serán de aquí en adelante los principios fundamentales sobre los que se construirán nuevas posibilidades para una mejor relación e intercambio con nuestro vecino del norte.
Recordemos que, a través de la historia, los acuerdos bilaterales han superado siempre cualquier escollo que intentan imponernos, por complejo que parezca. Al tiempo…
Activista social. @larapaola1