La inteligencia artificial vive una revolución, y 2025 ha marcado un punto de inflexión. El protagonismo reciente de DeepSeek, un laboratorio chino de IA, desafía el dominio de gigantes como OpenAI, Google y Meta. Con el modelo DeepSeek-R1, esta empresa ha demostrado que la innovación no necesita de enormes recursos, sino de eficiencia y creatividad.
Fundada en Hangzhou en 2023 por Liang Wenfeng, DeepSeek se enfocó en desarrollar sistemas avanzados con una perspectiva diferente: menos dependencia de capital externo y una clara apuesta por algoritmos más inteligentes. Liang, un ingeniero electrónico formado en la Universidad de Zhejiang, canalizó su experiencia en High-Flyer, un fondo de incubación que había creado, para priorizar la investigación a largo plazo.
Este enfoque audaz, sumado al talento joven y a una cultura de innovación, resultó en modelos como DeepSeek-V2 y, más recientemente, DeepSeek-R1, que destaca por su bajo costo, alto rendimiento, y su eficiencia en el uso de hardware; OpenAI empleó cerca de 16,000 chips Nvidia para entrenar su modelo GPT-4; miestras que DeepSeek R1 alcanzó resultados comparables utilizando solo 2,000 chips y con una inversión inferior a $6 millones, contrastando con los miles de millones invertidos por OpenAI. Esta notable diferencia en costos ha provocado inquietud en los mercados financieros, generando una disminución en el valor de las acciones de Nvidia.
Este logro es fruto de la implementación de arquitecturas eficientes como Mixture of Experts (MoE) y aprendizaje por refuerzo (RL). Además, Liang aseguró un suministro clave de chips Nvidia A100 antes de las sanciones estadounidenses, lo que le permitió superar restricciones y enfocarse en algoritmos energéticamente eficientes.
La aparición de DeepSeek no solo desafía la narrativa de que la innovación está reservada para quienes tienen mayores recursos, sino que también introduce un modelo disruptivo de acceso abierto. Mientras OpenAI, Meta y Google ofrecen sistemas de suscripción de costo, DeepSeek apuesta por la gratuidad, lo que ha generado críticas y elogios. Sin embargo, este modelo también plantea interrogantes sobre su sostenibilidad a largo plazo y las implicaciones de seguridad, especialmente al operar en un entorno regulado por el gobierno chino. Aunque su modelo de código abierto facilita auditorías externas, el escrutinio sobre el uso de datos persiste.
DeepSeek también destaca por su apuesta por la colaboración global y el desarrollo accesible. Su modelo DeepSeek-R1 permite procesar textos largos y complejos con una ventana de contexto de 128,000 tokens, algo que no solo optimiza el rendimiento, sino que también posiciona a la empresa como líder en eficiencia. Esta capacidad, unida a su enfoque abierto, ha incentivado el desarrollo conjunto con la comunidad tecnológica internacional.
El caso de DeepSeek invita a reflexionar sobre la relación entre innovación, costos e inclusión. En un momento donde los gigantes tecnológicos enfrentan críticas por sus modelos de negocio, DeepSeek redefine las reglas del juego. Su enfoque en hacer la IA más accesible plantea una visión de futuro donde la creatividad y la eficiencia son más valiosas que el poder financiero.
La historia de DeepSeek también ofrece lecciones para países como México y otros de América Latina. Las empresas en estas regiones enfrentan retos como el limitado de oportunidades y acceso a tecnología de punta, falta de capacitación y financiamiento, pero también tienen una gran oportunidad: invertir en la capacitación de talento joven, en el desarrollo de ecosistemas de colaboración abiertos, y en el fortalecimiento de una política pública que favorezca la inversión en investigación, desarrollo e innovación. La formación continua y la adaptación a modelos más eficientes podrían acelerar el crecimiento tecnológico, transformando las economías locales y aumentando su competitividad global.
DeepSeek representa una disrupción significativa en el panorama tecnológico global. Su historia demuestra que los grandes cambios no siempre provienen de quienes tienen los mayores recursos, sino de quienes saben cómo usarlos con ingenio. Aunque queda por ver si su modelo será sostenible en el largo plazo, su impacto ya ha dejado huella. La verdadera pregunta ahora es si otros seguirán su ejemplo o si DeepSeek será un jugador único en la historia de la inteligencia artificial.
Director Regional de EGADE Business School del Tecnológico de Monterrey para CDMX y Región Centro Sur.
@pablonecoechea