“Que el mundo fue y será una porquería ya lo dijo Enrique Santos”, si somos estrictos en nuestro análisis pocas cosas están bien en lo local y lo global. México es nota en los principales medios globales gracias a que el presidente López Obrador se coloca a el mismo por encima de la ley (y la popularidad se lo permite). Solo sorprende a quienes no han querido ver y escuchar las verdades que él pronuncia, desde siempre, sobre su persona. México y sus instituciones ya son vecinos del diablo.
Forbes en su edición global describe la situación con el siguiente encabezado “El presidente López Obrador no va a dejar de atacar a los periodistas”. La nota no es post la difusión del teléfono de Natalie Kitroeff, corresponsal del New York Times, fue publicada el 8 de febrero de 2022.
El #Blindspot de la semana está en que, de tan absurda y grave, la información deja de ser nota y se posiciona como chisme que se alimenta desde Palacio Nacional, porque hacerlo es construir la verdad del presidente en la mente de los ciudadanos afines y, hartazgo que muchas veces genera inamovilidad, entre quienes han dejado de apoyarlo o nunca lo han hecho.
La razón es simple, el presidente cree absurdamente que estar peleado con prácticamente todos los medios de comunicación le da más poder. El río se desbordó cuando él, uno de los top streamers de YouTube, decidió pelearse con su principal medio de difusión que, como todas las redes sociales, hace mucho dejo de ser el terreno de la libertad en términos de publicaciones. ¿Va a crear una nueva red social como amenazó Trump en su momento?
Esto no se detendrá, de hecho, será cada día más grave porque está sucediendo en nuestro país, pero también en el país de la libertad: Estados Unidos. “Consuelo de muchos, consuelo de tontos”.
Mientras esto sucede, nosotros, los ciudadanos, debemos de continuar construyendo nuestro propio destino. Personas, periodistas, empresas y corporativos debemos tener algo claro hay algo los presidentes de hoy en día atentan contra la ley, las instituciones y la democracia, pero por más autoritarios que sean no lo harán contra el consumo.
Hasta ahora la nota de la inversión de Amazon Web Services (AWS) de Rubén Mugártegui, se ha centrado en que es mayor a la de Tesla y que ha sido menos escandalosa en términos político-mediáticos. La realidad es que lo verdaderamente trascendente es que comprueba que más allá de los alborotos de quienes nos gobiernan, lo que está mandando es el consumo.
Aquí unos datos de World Data Lab que explican, de fondo, el porqué de la decisión de invertir a pesar de la incertidumbre política. Primero, a pesar de que el 81% de los nuevos consumidores estarán Asia, las proyecciones para 2024 señalan que respecto a la edición anterior, China perderá dos millones de consumidores y disminuirá el consumo en 27 mil millones de dólares. En ese mismo periodo LatAm suma seis millones de nuevos consumidores y tan sólo México aumento en más de ocho mil millones de dólares. No compensa, pero suma.
Analista y estratega en comunicación
@osandovalsaenz