En México han evolucionado los fenómenos de comisión del delito de fraude y extorsión, estas nuevas formas de operar por parte de los delincuentes inician a través de redes sociales, aplicaciones y páginas web, en lo cual observamos por parte del Estado mexicano deficiencia y desconocimiento en atender este problema, dejando en un estado de indefensión a las y los ciudadanos víctimas de estos delitos.
El uso de datos celulares y de antenas para tener conexión y acceder al denominado internet, actualmente es una necesidad social para interactuar en diferentes ámbitos laborales, escolares y sociales. Los delincuentes han afectado a miles e inclusive millones de personas y se han beneficiado o causando perjuicio a los usuarios.
Los delincuentes pueden operar en anonimato, adquiriendo información sensible de sus víctimas, misma que utilizan para la comisión de otros delitos, que incluso ponen en riesgo la integridad y la vida de las víctimas.
Estos delitos han ido escalando a otros ámbitos como el robo de identidad, robo de cuentas bancarias, lavado de dinero, delitos relacionados con pornografía de adultos e infantil, delitos relacionados con derechos de autor y propiedad intelectual.
Podemos describir otros ejemplos, sin embargo principalmente con los conceptos denominados como phising (a través del engaño obtienen datos personales de las víctimas), los malware (software instalado que recaba información personal) y el hacking (acceso a distancia a lo almacenado en un ordenador de manera ilícita), operan ilícitamente en las páginas web y aplicaciones de equipos móviles y computadoras, realizan este tipo de delitos, llevándolos a otro grado que compromete la integridad de las víctimas y sus familiares.
Se denota la falta de políticas públicas que favorezcan la colaboración entre las instituciones encargadas de la prevención, y procuración de justicia locales y federales, minimizando el trabajo colaborativo en beneficio a la prevención, investigación y sanción a este tipo de delitos.
No hay estudio legislativo que actualice los tipos de comisión de este delito, a pesar de observarse el impacto grave que se da en la sociedad mexicana, las lagunas jurídicas debilitan la persecución y sanción de estos delitos con sus agravantes.
El Código Penal Federal contempla este tipo de delito como Acceso ilícito a sistemas y equipos de informática, en 7 preceptos legales destacando que todas las penalidades en la comisión de este delito son aptas para llevar el proceso acusatorio y oral penal mexicano en libertad (para primodelincuentes).
Recordemos que en julio del 2022 la Secretaría de Defensa Nacional de México fue víctima de hackeo por el grupo delictivo denominado “guacamaya”, quienes operan a nivel internacional, dejando expuesta a esta importante institución encargada de la Seguridad Nacional e Interior de México y que sus datos revelados tuvieron el carácter de confidencialidad derivado del trabajo de inteligencia desarrollado por otras instituciones y por SEDENA.
Al día de hoy, no hay resultados en las investigaciones por parte de las autoridades para imputar este delito, únicamente al personal adscrito a la Dirección de Informática de la SEDENA.
A pesar de que el Estado minimiza las afecciones a la SEDENA, es importante que el Poder Ejecutivo y Legislativo se unan para fortalecer la seguridad y la prevención en estos tipos de delitos a favor de la sociedad y de sus instituciones.
Basta del recorte presupuestal y la falta de política pública en materia de seguridad, México no solo requiere atender estas nuevas modalidades de delitos, sino también debe dotar de equipo y de conocimiento a los encargados de perseguir, y sancionar estos delitos cibernéticos que merman la tranquilidad social e institucional en México,
Debe dejar de existir la injusticia y la impunidad en las víctimas; en México se observa negligencia en el Estado a través de sus instituciones sin estar preparadas para proteger, investigar y sancionar el delito y como consecuencia merma la tranquilidad del ciudadano.
Investigador jurídico del Observatorio Nacional Ciudadano.
@CanizalezYair