Este 2024 no será un año común. Sin duda, cada año presenta sus propias dinámicas, acciones, situaciones, etc., que guardan cierto impacto local, regional o para la comunidad internacional. Lo que diferencia el actual es que estará lleno eventos que serán determinantes para todo el globo en mayor o menor medida. ¿Cuáles son estos eventos y qué impacto tienen para las relaciones internacionales?
Claramente, cada año es impredecible en algunas cosas. Hay algunos acontecimientos que surgen y que no estaban contemplados, pero hay muchos otros que sabemos que sucederán o que continuarán desenvolviéndose a lo largo de esta docena de meses que comprenderán 2024. Elecciones regionales y nacionales, formulaciones y reformulaciones de alianzas, desarrollo de conflictos y avances tecnológicos, por ejemplo, son algunos de los eventos que protagonizarán este año y el estudio y análisis en las relaciones internacionales.
Enfocándonos en las elecciones, 2024 albergará una serie de comicios de la más alta relevancia para el globo. Además de nuestras propias elecciones presidenciales, que guardan una incidencia regional y estratégica con algunos países de la talla de Estados Unidos de América (EUA), Canadá y China, además de una importante zona como Latinoamérica; hay otras que serán observadas por todo el mundo por lo cruciales que son para el ordenamiento de los intereses y acciones de los estados.
Quizá la que más ha tenido cobertura es la carrera presidencial de EUA. A pesar de su declive en los últimos años, el país de las barras y las estrellas sigue siendo la hegemonía del globo, por lo que su gobierno conducirá todavía una parte significativa de la política internacional en la actualidad y podría incidir en la manera en la que los estados moldean su acción al exterior. Washington también puede influir en asuntos y dinámicas de mayor peso, como el expansionismo de China y las acciones de Rusia, entre otras. Por ende, es un tema relevante.
Otras elecciones también de peso son las de India. El gobierno indio es uno de los más reconocidos a nivel global por la importancia que el país ha obtenido en el escenario internacional en materia económica, comercial y política. Todo parece indicar que habría continuidad con el actual mandatario, lo que permitiría seguir con la política multipolar que se dicta desde Nueva Delhi. Pero todo puede pasar y si se genera una transición democrática, el efecto en la política exterior sería uno de los resultados que podríamos entrever.
Reino Unido también celebrará elecciones generales a final de año, mismas que quizá concluyan con un cambio en el gobierno. Los conservadores han perdido mucha credibilidad luego del Brexit y de las controversias durante y después de la pandemia de Covid-19, de ahí que muchos británicos comenzaran a cambiar de opinión y elevado el nivel de preferencia hacia los laboristas desde hace un par de años. El intercambio de colores en Westminster y en el número 10 de Downing Street podría generar modificaciones interesantes en la política doméstica de la isla anglosajona, pero también en el apoyo que podría dirigirse desde Londres hacia Kiev en el marco de la guerra en el este de Europa.
Asimismo, la Unión Europea (UE) sostendrá elecciones para su Parlamento Europeo. Más de 700 escaños serán elegidos en 27 países a través del voto popular, modificando la composición de una de las instituciones centrales de esta organización supranacional. Pero no es la única modificación, el presidente del Consejo Europeo agotó sus periodos permitidos, por lo que un nuevo liderazgo deberá ser apuntado. Por otro lado, la presidencia de la Comisión Europea habrá terminado su primer periodo, pero, de ser apoyada, podría continuar con un segundo y final ciclo que concluirá en 2029.
Las elecciones en la UE tienen un impacto doméstico, pero también internacional. Al interior, los eurodiputados elegidos ayudarán a moldear una política para casi una treintena de países, además de que coadyuvarían a avanzar en una expansión en el número de integrantes del conglomerado europeo de naciones. Al exterior, el nuevo liderazgo en el Consejo Europeo y el cambio o la continuidad en la dirección de la Comisión Europea podrían ser determinantes en alimentar la posición de Bruselas con sus aliados y rivales, así como en conflictos de grave incidencia, como la guerra de Rusia y Ucrania, y el genocidio de Israel hacia los palestinos.
Finalmente, dos comicios presidenciales determinantes en este año son los de Rusia y Taiwán. Para el primer caso, si bien son objeto de atención mundial, se trata de mero trámite para el actual líder del Kremlin, quien ha sabido eliminar a la oposición política y quien ha logrado permanecer en su puesto mucho más de lo que en principio habría permitido la constitución del país. Para nada se esperan sorpresas en el escenario ruso.
No obstante, para las elecciones en la antigua isla de Formosa, estas se celebraron ayer y significaron una declaración contundente ante los intereses de China de anexar a Taiwán. La victoria del partido en turno permite seguir construyendo un gobierno que continuará resistiendo a las presiones y agresiones de Beijing, a la par que fortalecería sus relaciones con socios estratégicos, como Japón, Corea del Sur y, claro, EUA.
Principalmente, estas elecciones, además de reflejarse en sus respectivos espacios, tienen el potencial de incidir fuera de ellos y a una escala internacional. Los cambios o continuidades en los gobiernos, como se mencionó, podrían generar efectos hacia el exterior, modificando las dinámicas y acciones en el escenario internacional. Así, las relaciones internacionales podrían entrar en una nueva etapa llena de desafíos de estaremos gustosos de estudiar y analizar.
Historiador e internacionalista
@NielsRosasV (Twitter)