Si algo han aprendido los nadadores mexicanos, en los últimos años, es a siempre luchar por sus sueños y objetivos, sin importar qué es lo que tengan que hacer para seguir su camino. Hoy en día, 25 de estos muchachos están en busca de mejorar sus marcas, pensando en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 ; son 25 atletas que no bajaron los brazos cuando, quienes se supone que deberían brindarles todo lo que necesitan para su desarrollo, simple y sencillamente los abandonaron.
La frase “nos vemos en enero” quedará marcada en la historia como uno de los golpes más duros que dio esta administración de la Federación Mexicana de Natación a sus deportistas, con la pandemia encima. Nunca hubo ni siquiera un amago por tratar de encontrar soluciones a las dificultades que de por sí enfrentaban los atletas para seguir con sus carreras, como lo hicieron en otras partes del mundo.
Increíble que, mientras en la federación esperan a que noviembre y diciembre pasen sin pena ni gloria —en lo deportivo, porque ya sabemos que para lo de las elecciones sí están atentos—, en Estados Unidos, por ejemplo, haya nueve sedes de competencias simultáneas, lugares en los que se cuida hasta el último detalle por los protocolos sanitarios y en los que participan nadadores de élite, en busca de seguir su camino rumbo a los Olímpicos.
Estas competencias se llevan a cabo en San Antonio, Texas; Irvine, California; Beaverton, Oregon; Des Moines, Iowa; Greensboro, Carolina del Norte; Huntsville, Alabama; Indianapolis, Indiana; Richmond, Virginia; y Sarasota, Florida, y en algunas de éstas estarán participando nuestros nadadores, quienes desafortunadamente saben que en México no hay nada para ellos, debido al poco interés y la apatía de sus autoridades.
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Estos atletas ya ganaron, al momento de haber conseguido el apoyo de su gente cercana y de sus respectivos institutos del deporte para poder realizar los respectivos viajes y también para poder ser inscritos en estas competencias. Se han preparado fuerte y no se rendirán en busca de las marcas que les permitan ir a Tokio .
Es complicado, pero si algo han demostrado es que tienen un gran espíritu, tanto en lo humano como en lo competitivo. Se trata de una gran generación de nadadores que le ha dado muchas satisfacciones al país y que no quiere dejar de darle esos triunfos, lo que los hace desde ya dignos de reconocimiento por parte de la sociedad acuática, que siempre está al pendiente de ellos.
Por supuesto que en este espacio y en EL UNIVERSAL Deportes estaremos al pendiente de los resultados que obtengan estos muchachos, quienes no han dejado de luchar por alcanzar sus objetivos, a pesar de las dificultades y obstáculos que les han puesto quienes volverán a trabajar “hasta enero”, como le anunciaron a sus deportistas.
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