A lo largo y ancho de la República Mexicana existen bienes inmuebles que fueron escenarios de acontecimientos históricos; por desgracia muchos de estos mudos testigos hoy lucen descuidados o destruídos ya sea por la indiferencia y desconocimiento de la comunidad, o bien, por el abandono de las mismas autoridades.
En esta entrega de Mochilazo en el Tiempo haremos un recuento muy general de solo algunas de estas casas o construcciones olvidadas en nuestro país. Iniciamos con la casa de campo de Ciudad Jiménez, Chihuahua, propiedad del presidente de los Estados Unidos Lyndon B. Jonhson, misma que fue un regalo de políticos mexicanos.
Se trata de un rancho de 44 mil hectáreas, que llegó a tener 2 mil 800 cabezas de ganado, centenares de caballos de los más finos, con una pista de aterrizaje que ni siquiera el aeropuerto que Chihuahua tenía (cuando en ese entonces se encontraba en lo que hoy es la Avenida Universidad en la capital), también tenía una mansión con un patio central; este rancho era un verdadero oasis en el desierto que el mandatario estadounidense visitó en más de dos ocasiones.
Lee también El parque con el nombre de un presidente estadounidense

Hoy en día de aquella casona de estilo californiano aún se conservan algunos muros y espacios que bien serían dignos de habilitar para un recorrido turístico, el hangar que se mandó construir en aquel entonces a base de lámina galvanizada, hoy está abandonado y tiene agujeros en su bóveda superior. La pista se encuentra con maleza y hierbas sobre la carpeta asfáltica que aún conserva un señalamiento horizontal de color blanco que al parecer indica en punto medio de la superficie de aterrizaje.
Del cuartel de Francisco I. Madero, hoy solo queda una réplica de la casa de adobe
Otro caso de ingratitud con la historia ocurrió en la década de los 50´s en Ciudad Juárez, Chihuahua, cuando una empresa constructora que se publicitaba con el eslogan: “construimos historia” ganó un proyecto para derrumbar una pequeña pero histórica casa de adobe del siglo XIX cercana al Río Bravo.
En pleno apogeo de la época revolucionaria, en 1911, fungió como la Presidencia Provisional y Cuartel de Francisco I. Madero, acontecimiento del cual hay varias fotografías.

Durante mucho tiempo permaneció en el olvido lo que algún día fue sede de la dirección del país, hasta que en la administración 2010-2013 del alcalde Héctor Murguía Lardizábal se construyó una réplica de la Casa de Adobe que abrió al público en mayo del 2011, justo en el marco del 100 Aniversario de la Toma de Ciudad Juárez, hoy es un museo.
Varios coinciden en afirmar que lo mejor es que la finca se hubiera intervenido en lugar de derrumbase, pero el hubiera ya no existe.
Lee también Francisco I. Madero y su polémica práctica del Espiritismo
La casa del artista cuyas pinturas se plasmaron en las cajas amarillas de cerillos
En Chihuahua capital, hay una finca dentro del polígono del Centro Histórico en la cual nació Jesús Enrique Emilio de la Helguera Espinoza, reconocido pintor e ilustrador chihuahuense mejor conocido como Jesús Helguera quien plasmó en sus obras a nuestro colorido país creando utopía de la belleza nacional, no sólo en cuadros, sino también en almanaques de la cigarrera regiomontana “La Moderna” que se distribuyeron por todo el país y quedaron plasmados en las clásicas y famosas cajas de fósforos de color amarillo.

Cuando Helguera era pequeño él y su familia se trasladaron a la Ciudad de México y dos años más tarde a Córdova, Veracruz. Cuando tenía cinco años de edad se mudaron a España, país que lo vio crecer y años más tarde formar una familia con Julia González Llanos; más tarde decidieron radicar en México.
La hermosa madrileña se convirtió en la modelo de algunas de sus obras portando atuendos tradicionales creando un sincrentismo cultural al lograr una amalgama de tradiciones.
Pero volvamos a Chihuahua, justo al lugar donde el maestro Helguera nació, al exterior de la casona se observa que la finca carece de mantenimiento, al menos en su fachada que en partes ya deja ver el muro de adobe, que al quedar al descubierto iniciará su pronta degradación.


Esta es una de las cuatro fincas que se encuentran en esa cuadra, las cuales cuentan con un patio central -típico en las fincas del Chihuahua antiguo-. Sus ventanas resguardan entre sus marcos el polvo acumulado de hace algunos años, el recubrimiento del rodapié está comenzando a caerse de poco en poco, el pecho paloma de cantera en el pretil carece de más del cincuenta por ciento de sus piezas y algunas otras están por colapsar.
Cerca de la ventana izquierda se aprecia una pequeña placa de color negro que hace alusión al nacimiento del famoso pintor, colocada en la conmemoración del primer centenario de su natalicio.
En semanas recientes se publicó un texto para Mochilazo en el tiempo donde narro la historia del científico Arturo Rosenblueth Stearns, en el cual se menciona el lugar donde nació: en la calle Juárez y Segunda, en pleno corazón de Ciudad Guerrero, Chihuahua.

En esta casa hay una placa adosada en un muro de lo que al parecer años atrás fue el vano de una puerta o ventana, que contiene la siguiente cita: “Aquí nació Don Arturo Rosenblueth Stearns, El Científico más grande que ha dado este país” 1900-1970. Sus restos descansan en la Rotonda de los Hombre Ilustres en la Ciudad de México.
La construcción vista desde el exterior tiene un buen aspecto, ya que la pintura se observa aceptable, pero al interior hay áreas sin techumbre y montones de basura, así como muebles que se han quedado ahí desde hace mucho tiempo e indicios de lo que parece haber sido utilizada como refugio temporal de alguna persona sin hogar.
Como arquitecta y defensora del Patrimonio Cultural, Histórico y Arquitectónico me gustaría invitar a algún empresario local en el rescate del lugar, que podría fungir como centro cultural, café literario, tienda de artesanías o de venta de productos de la región como las famosas salsas de manzana, vinos artesanales, dulces de leche, entre otros para que, luego de redituarle al inversor, las ganancias ayuden al mantenimiento de la finca.


Luego de recorrer por unos minutos la plaza principal de Ciudad Guerrero pregunté a varias personas si sabían dónde estaba la casa del famoso científico. La mayoría no supo su ubicación y no tenían ni idea de quién les hablaba, sólo una persona supo darme indicaciones de cómo llegar, tan solo porque “recordó haber visto alguna vez una placa adosada a un muro”. Fue sorprendente el desconocimiento de la población local acerca del ilustre personaje guerrerense.
El Mausoleo de Villa, uno de los más visitados en Chihuahua
El Mausoleo de Villa o Cenotafio es uno de los puntos turísticos más visitados de la capital de Chihuahua, pues aunque Francisco Villa no nació ahí, sí fue el lugar donde más permaneció, ideó estrategias y logísticas durante la Revolución.
El famoso mausoleo se encuentra en el actual Parque de la Revolución, en lo que alguna fue parte del extinto El Panteón de la Regla; su autor fue el canterero Santos Vega y es de estilo ecléctico, neoclásico por encomienda de Francisco Villa en el periodo de 1914-1915.
Lee también “Las Memorias de Francisco Villa” parte 1 de 6: la niñez del Centauro del Norte
Villa deseaba que cuando él muriera su cuerpo descansara e incluso mandó a hacer la construcción de otra tumba contigua a la suya para sus generales (rotonda). Luego de ser asesinado el 20 de julio de 1923, el gobernador en turno Ignacio C. Enríquez negó toda posibilidad para que el cuerpo del caudillo descansara en la tumba que el Centauro del Norte se había mandado construir, es por ello que se le llama Mausoleo o Cenotafio desde hace muchos años.

En el 2013, es decir, en el noventa aniversario luctuoso del general, el entonces gobernador César Duarte Jáquez se empeñó en que el citado monumento fuera reubicado a la Plaza Mayor, a un costado del Palacio de Gobierno, ya que el mandatario se autonombraba: “villista de corazón”.
Pero el descontento de vecinos, historiadores, personalidades, asociaciones y políticos no se hizo esperar, por lo que se dirigieron varios documentos al gobernador, al congreso del estado entre otras instituciones que regulan los temas patrimoniales, a los que solicitaban la revocación de la pretensión del gobernador; además, se sumaron las críticas de la prensa local por tratarse del monumento de uno de los personajes más famosos de México.
La mayor presión surgió de los vecinos y ciudadanos que ingresaron un documento acompañado de poco más de dos mil firmas, además organizaron una guardia y resguardo permanente del monumento con horarios de rotación para evitar cualquier sorpresa durante la madrugada, en uno de esos momentos realizaron una valla entrelazando sus manos al frente del monumento.


Estos esfuerzos lograron la cancelación para reubicarlo; hoy en día permanece en su lugar de orígen. Por desgracia la rotonda de los generales, contigua a la tumba de Villa no corrió con la misma suerte, ya que en 1950 se trasladó al Instituto Tecnológico de Chihuahua, luego a la Ciudad Deportiva para albergar los restos de los Chihuahuenses Ilustres y finalmente, en el 2010, en pleno Centenario de la Revolución fue reubicado al Nuevo Campus Universitario de la máxima casa de estudios de la capital.


Desde aquí un llamado para que regrese a su lugar de origen, pues aparte de que los restos de los Chihuahuenses Ilustres fueron reubicados en una nueva rotonda habilitada al pie del ángel de la Plaza Mayor, la Rotonda, como se le conoce al monumento, merece regresar a su lugar original, para abonar al entorno del Mausoleo, en vez de quedar olvidada en una loma lejana a los edificios de dicho centro educativo; en cambio, al regresar podrá ser apreciada por miles de turistas que diariamente visitan el Monumento Villista y recobrar el motivo por el cual fue hecha.
Esta entrega para Mochilazo en el Tiempo, más que exhibir pretende hacer un llamado a la población en general, al gobierno local y a los particulares para que las fincas con valor histórico que aún podemos ver, no queden en el recuerdo de algunas generaciones, sino también para que las futuras puedan seguir disfrutando de su belleza arquitectónica y de la historia que resguardan estos inmuebles.
- Fuentes
- “México y sus Progresos, Album-Directorio del Estado de Chihuahua”/Primera Edición 1904/Segunda Edición 2004
- Revolución en el Panteón/José Carlos Aguilar/Primera Edición 2006
- La Tablita/Eva Muñóz Félix y Aída Samaniego Muñoz/ Primera Edición 2007
- Guía Histórica de la Ciudad de Chihuahua/Francisco R. Almada, 1984
- Catálogo Nacional de Monumentos Históricos-Inmuebles, Estado de Chihuahua/Tomo I y II Impreso en junio de 1986
- Librería del Congreso de los Estados Unidos
- Google Maps
- Fototeca INAH Nacional