“Crear esperanza a través de la acción” fue el tema del Día Mundial de la Prevención del Suicidio este año. Este tema refleja lo importante que es la acción colectiva para abordar de manera urgente este problema de salud pública en cualquier parte del mundo.
El 2023 ha estado marcado por sucesos violentos y desesperanzadores a nivel mundial: la guerra, terremotos, incendios masivos, crisis climáticas, pobreza y mucha violencia. El suicidio es un problema de salud pública y un problema sociosanitario de primer orden que afecta al ser humano sin importar la etapa del desarrollo por la que transita y México no es la excepción.
Apenas el año pasado, el INEGI reportó que “en 2017, la tasa de suicidio fue de 5.3 por cada 100 mil habitantes (6 mil 494); para 2022, de 6.3 (8 mil 123). Esto equivale a 1 mil 629 suicidios más en 2022 con respecto a los ocurridos en 2017”. En tanto, la tasa de suicidio entre niños de 10 a 14 años fue de 2.1 por cada 100 mil y en adolescentes de 15 a 19 años de 7.7 por cada 100 mil.
El aumento en la tasa de suicidios en todos los grupos es significativo. Razón por la que parece ineludible tomar acciones colectivas. Todas y todos, familiares, amistades, colegas de trabajo, miembros de la comunidad, educadores, líderes religiosos, profesionales de la salud, funcionarios públicos y gobernantes, podemos tomar medidas para prevenir el suicidio.
Lo principal para evitarlo es crear conciencia en todos los sectores posibles. De esta manera se podrá accionar a través de promover la colaboración y el empoderamiento de las partes interesadas para abordar la autolesión y el suicidio a partir de acciones preventivas.
El suicidio en México es un tema latente en nuestra sociedad. A pesar de tener una cultura que cuenta con festividades cada mes, con un talento para convertir las tragedias en risas y con una gran capacidad de resistir a condiciones complejas, las y los mexicanos atraviesan crisis que no siempre son visibles.
El desempleo, pérdidas económicas, el aumento en costos de vivienda, la pobreza y la desigualdad social son algunos de los factores que influyen directamente en la salud mental de las personas. Lo cual lamentablemente puede terminar en el suicidio.
Por eso, en Save the Children ponemos especial atención en las posibilidades que como organización vamos encontrando para sumar esfuerzos para atender este tema. Por eso, capacitamos a otras organizaciones no gubernamentales, a personal de salud y a nuestros propios colaboradores, para poder sensibilizar y proveer de algunas herramientas que sirvan en las labores de acompañamiento a personas que estén en situaciones vulnerables.
La prevención del suicidio no debe ser responsabilidad de unos cuántos. Todos somos agentes de cambio en nuestro entorno y como tal es importante que nos informemos, sensibilicemos y seamos solidarios con quien lo necesita.
Si tú o alguien que conoces está pasando un mal momento, puedes llamar a la Línea de la Vida al 800 911 2000, que está disponible las 24 horas, los 365 días del año.