Existe la idea preconcebida de que las personas deben acudir a los juzgados y tribunales, que deben trasladarse horas para llegar al lugar donde están los órganos judiciales. En nuestro país, aún se tiene la imagen de que los juzgados y tribunales son lugares para las elites, de poco acceso, distantes de la ciudadanía, que solo pueden acudir la sociedad con personas que ejerzan la abogacía, que el lenguaje utilizado es muy técnico y lo relacionan incluso con la privación de la libertad, independientemente del caso.
En nuestro país, hay avances significativos en la impartición de justicia virtual o remota, sin embargo, aún hay personas principalmente en el medio rural que tampoco tiene acceso al internet y la banda ancha, bien por condiciones económicas o por la edad avanzada que se vincula a poco uso de herramientas digitales.
Para las mujeres que habitan en el campo, es más notorio las barreras geográficas, económicas, sociales, culturales que enfrentan para acceder a la justicia agraria, principalmente para las que viven en regiones remotas y presentan mayores vulnerabilidades por ingreso, edad, cultura e incluso al ser monolingües. Ello hace que no inicien sus causas a través del juicio, generando inseguridad patrimonial e injusticia, que les limita el ejercicio de sus derechos, perpetuando pobreza y discriminación.
Los Tribunales Agrarios, tienen un instrumento eficaz, para garantizar el derecho humano de acceso a la justicia y a la tutela efectiva con la justicia agraria itinerante, mostrando que los tribunales pueden estar cerca de ti, pueden acudir al lugar donde está la controversia, para hacer posible el ejercicio de los derechos que consagra la Constitución a todas las personas.
El 15% de los juicios agrarios que se atendieron en 2022 fue a través de jornadas de justicia itinerante. Es decir, casi una 5ª parte de los juicios agrarios, las partes ya no acuden a las sedes de los tribunales agrarios, estos van a ellos.
En el año 2022, se celebraron 146 jornadas de justicia itinerante con la participación de 3417 núcleos agrarios de 1102 municipios, se atendieron 7855 asuntos. En este marco con el programa de mujeres por acceso a la tierra 6000 fueron reconocidas con sentencias de Tribunales Agrarios como titulares de derechos parcelarios y de uso común en ejidos y comunidades, bien por herencia o por prescripción adquisitiva, mayoritariamente en jornadas de justicia itinerante, organizadas de forma conjunta con la Procuraduría Agraria y el Registro Agrario Nacional.
El impacto positivo de la justicia itinerante es relevante porque no solo se atiende a personas con escasos recursos económicos, sino a mujeres en diferentes condiciones que difícilmente se trasladan de sus lugares de origen a las capitales de las entidades federativas o sedes de tribunales agrarios.
La justicia agraria itinerante, es una solución atípica, contraria a la historia de la humanidad, en la cual los juzgados y tribunales están en la metrópoli, hay que acudir a estos espacios, su impacto es tan positivo que debiera analizarse su instrumentación en otras jurisdicciones del orden federal y estatal.