Tendremos que contar la historia. Habrá que contar todo lo que nuestro país tuvo que recorrer para lograr que los votos fueran libres y que pudieran contarse por los ciudadanos. Tenemos que contar la historia de la Transición Democrática. Esa transición que ha borrado el gobierno. Será nuestra labor reescribir la historia para que se conozca y generaciones futuras estén conscientes de lo que significó la lucha por un Estado de Derecho que respetara y buscara la división de poderes y una democracia en la que hubiera garantías elementales de libertad y de ejercicio del derecho a votar y ser votado.
Tenemos que recordar a los mexicanos lo que es verdaderamente una elección. Tenemos que ser suficientemente claros en qué condiciones podemos salir a votar para que dicho ejercicio sea realmente una elección. La democracia no se reduce a una elección, pero sí se refleja en ella.
¿Qué es lo que garantiza que una elección sea verdaderamente democrática? Que sea sencillo votar, que se sepa qué se está votando y que exista confianza en el proceso y en los resultados de la jornada electoral.
La elección de los miembros del Poder Judicial no fue elección porque no participó de los elementos mínimos esenciales para considerarse como tal. Y es importante tomarlo en cuenta porque no podemos permitir que quieran repetir este mismo desaseo en el proceso electoral de 2027 y les dé igual integrar en una boleta grande a los diputados federales y locales que se van a elegir para el Congreso de la Unión.
El Derecho a Votar no se respetó en la mal llamada elección del Poder Judicial porque, antes que nada, hicieron todo por confundir, por desinformar sobre qué se estaba votando y, además, por la desconfianza que generaron en todos los sentidos. Doy tres ejemplos:
Primero, no fue sencillo votar, hasta el expresidente que hizo —en venganza— la mal llamada reforma judicial, necesitó de un acordeón para no equivocarse. Incluso él, en sus marañas, en sus propias trampas y tómbolas se enredó con las boletas. Era imposible votar por todos los cargos. Por eso no querían testigos. Si votar era difícil, contar los votos será más complicado.
Segundo, en una misma entidad, es más en una misma alcaldía, se votaba por cargos diferentes, de tal modo que nadie sabía qué era lo que se iba a votar. Sobraron entrevistas de quienes no tenían ni idea qué era lo que se votaba y, por lo tanto, se multiplicó el voto corporativo (que está expresamente prohibido) el acarreo y los acordeones.
Tercero, esta fue quizás la elección que más desconfianza ha causado en los últimos 30 años, porque nadie la pudo cuidar, porque no se contaron los votos ahí mismo, porque tampoco se anularon boletas no utilizadas, porque la presidenta del INE salió a regañar a opositores al gobierno y hasta el titular de la UIF. Además de los acordeones, los operativos del gobierno de la Ciudad de México que fueron descubiertos crearon todavía más desconfianza.
Se impugnará la elección, quizá. Habrá gente buena electa, también, pero de telón de fondo hay una verdad: el Poder Judicial no puede elegirse por el voto popular. Es un disparate, aunque sea popular.
No estoy segura cuál debió haber sido la estrategia para el día de ayer, pero hay algo que sí tenemos que hacer quienes estamos por un Estado democrático y constitucional de Derecho: ORGANIZARNOS. Lo de ayer, al final de cuentas, fue una tragedia por todos lados. Y un día triste.
Frente al gobierno autoritario, lo único que nos queda es organizarnos. No podemos seguir actuando como si estuviéramos en condiciones democráticas, porque no lo estamos. No podemos decidir al final y dejar a un lado a quienes, de buena fe, participan en un proceso respecto del cual ignoraban que mucha gente iba a decidir no votar. Hay muchas cosas qué hacer. Tratemos de deliberar antes y, por favor, hagamos lo posible por decidir nuestras acciones desde el amor a México y no desde la amargura, aunque haya razones para tenerla.
Ayer fuimos testigos de la anulación del principio de independencia del Poder Judicial, pero hoy puede ser el inicio de la reconstrucción de la vida política y democrática de nuestro México.
Nota: estas líneas fueron enviadas al cierre de las casillas. Desconozco los resultados de las elecciones en Veracruz y Durango, mañana hablaremos de algunos triunfos de la oposición . Las que se refieren al poder judicial, dijo el INE que en 10 días tendríamos los resultados.
Diputada federal. @mzavalagc