La que “se está guardando sus ases” en Tabasco, nos platican, es la senadora Mónica Fernández Balboa (Morena), pues a diferencia de los más de ocho aspirantes a la candidatura de Morena a gobernador que “andan volados” haciendo campaña disfrazada, la legisladora reconoció su interés, pero anunció que esperará a que su partido decida el género de la postulación. Nos indican que algunos contemplan la posibilidad de que, para evitar fracturas entre Javier May, Óscar Cantón, Jaime Lastra y demás aspirantes, Morena podría optar por una mujer como candidata y sólo hay tres opciones: doña Mónica, Yolanda Osuna Huerta y Rosalina López Hernández. Buena jugada.
Guerra de videos
En Chihuahua, nos cuentan que un encontrón a “videazos” tuvieron las diputadas federales Andrea Chávez Treviño (Morena) y Daniela Soraya Álvarez Hernández (PAN). Nos relatan que doña Andrea publicó un video en el que se fue contra el PAN y la gobernadora María Eugenia Campos Galván (PAN), pero “le salió más caro el caldo que las albóndigas”, pues doña Daniela le reviró con otro video en el que le recordó que no ha respondido a los cuestionamientos sobre el uso de camionetas blindadas y aviones privados para ella y su familia, ni ha aclarado lo de su oficina de enlace fantasma (inexistente) en Ciudad Juárez, por la cual cobra en la Cámara de Diputados. ¿Se quedaría muda doña Andrea?
Polémica por suicidio en prisión de Guasave
Desde Sinaloa, nos comparten que el caso de un homicidio levantó polémica por las carencias en la ayuda siquiátrica. Nos relatan que hace unos días una mujer indígena de origen tarahumara fue detenida por el homicidio y sepultura clandestina de su hija de cuatro años, pero cuando iba a ser sujeta a proceso, en el Centro Penitenciario de Guasave, la mujer se quitó la vida en el área de observación, en espera de ser valorada, por lo que el alcalde Martín Ahumada Quintero (Morena) “le puso el cascabel al gato” al criticar el servicio de salud estatal y, aunque no reprochó a alguna autoridad en especial, en el aire quedó si se trató de negligencia o apatía en la responsabilidad y cuidado hacia la mujer. ¡Ups!