Donde sube de tono la disputa, nos comentan, es en Baja California Sur, pues varios morenistas consideran que, además de estar en juego la alcaldía de La Paz, es también el primer paso para la gubernatura de 2027. Nos relatan que el joven Manuel Cota Cárdenas, hijo del exgobernador Leonel Cota Montaño (Morena), arremetió contra el gobernador Víctor Castro Cosío (Morena), a quien exigió sacar las manos, pues impulsa la reelección de la alcaldesa Milena Quiroga Romero (Morena) pese a no ser “santo de la devoción” de muchos, y lo peor es que, “bien oportuno”, el líder estatal guinda, Alberto Rentería Santana, anunció que aplazarán el resultado de las encuestas, sin dar explicaciones, lo que generó más suspicacias. Ya se dice que “el voto de castigo” está en la mira.
Los retos del Poder Judicial
Donde priva la incertidumbre, nos cuentan, es en el Poder Judicial de Zacatecas por ver quién será su nuevo líder o lideresa, ya que el 31 de enero el magistrado Arturo Nahle García concluirá su periodo como presidente, en el que se ha caracterizado por ser rebelde y se ha puesto al tú por tú con el Ejecutivo y Legislativo por el presupuesto, al grado que en su último informe el gobernador David Monreal Ávila (Morena) no se tomó la molestia de acudir. Nos indican que quien logre los votos para el puesto deberá demostrar si seguirá dando la batalla o se someterá a don David y la táctica presidencial de acusar de “corruptos” a jueces y magistrados. ¡Ups!
Mantienen bajo llave a exalcaldesa
La que anda de malas en Chihuahua, nos cuentan, es la exalcaldesa de Nuevo Casas Grandes, la expetista Cynthia Marina Ceballos Delgado (independiente), quien está en el Cereso estatal desde el año pasado acusada de peculado. Nos relatan que doña Cynthia obtuvo un amparo contra la medida cautelar que la tiene en prisión y sólo tenía que pagar 700 mil pesos de garantía para llevar su proceso en libertad, pero casi con un pie fuera, le fue ejecutada una nueva orden de aprehensión por la presunta compra irregular de camiones de basura, que costaron más de 4 millones de pesos, y le aplicaron el clásico “va pa’tras” y ahora a esperar que llegue un nuevo amparo… o acusación. ¡Zas!