Desde Chiapas, nos cuentan que en el pasado informe del gobernador Eduardo Ramírez Aguilar (Morena), el senador José Manuel Cruz Castellanos (Morena) y el diputado federal Guillermo Rafael Santiago Rodríguez (Morena) fueron los “invitados incómodos” del evento. Nos relatan que don José Manuel, quien fue secretario de Salud en la pasada administración y está bajo la lupa de la auditoría estatal por presuntos malos manejos, fue recibido por un grupo de manifestantes que le gritaron el clásico “¡fuera, fuera!” y que devolviera lo que se llevó, mientras que a don Guillermo se le vio eufórico tomándose fotos con don Eduardo a pesar de que hace poco más de un año afirmaba que con él “no caminaría ni a la esquina”. ¡Qué invitados!
Aplica vía corta en Maratón
A la que balconearon en Nuevo León, nos platican, fue a la titular de Leche para el Bienestar del Estado, Gloria Treviño Salazar (Morena), pues se inscribió al Maratón de Monterrey, pero en la marca oficial sus tiempos no checan. Nos detallan que en su registro doña Gloria aparece hasta la mitad de la competencia (21 kilómetros) con tiempo de poco más de una hora corriendo, lo cual sólo hacen algunos kenianos y, aunque terminó la competencia con tiempo de más de 4 horas 44 minutos, fue exhibida por hacer trampa en esta competencia muy importante para los runners, por lo que ante las críticas doña Gloria argumentó que ella sólo iba por correr 21 kilómetros… (y por la medalla). ¿No será mejor inscribirse a un medio maratón y ya?
Nadie le avisó a dirigente priista
El que aplicó el clásico “avísenme” en Sinaloa, nos comentan, fue el recién electo presidente del comité municipal del PRI en Culiacán, Noé Heredia Ayón, pues para demostrar que “tiene la camiseta bien puesta” posteó un mensaje en el que aseguró que ellos no son comparsa ni aprueban que la entidad adquiera nueva deuda. Sin embargo, nos indican que nadie le dijo que los diputados locales de su partido votaron a favor de la solicitud del gobierno estatal para contratar un nuevo crédito de 2 mil 200 millones de pesos y sólo generó que más de uno le reclamara la doble cara. ¡Qué oso!