El que anda “como marchante en mercado”, nos cuentan, es el dirigente de Morena en Veracruz, Esteban Ramírez Zepeta, pues anda “de un lado a otro” sondeando entre los alcaldes de oposición para sumarlos a su causa. Hasta ahora, nos indican, suma al menos 10 presidentes municipales electos del PT, PRI y PAN que fueron “convencidos” de llevar los colores de la 4T, incluso algunos de ellos siendo familiares de las actuales autoridades municipales, algo que los morenistas repudiaron en la elección pasada, por lo que hay quienes dicen que don Esteban busca “ganar en la mesa y negociando para presumir lo que no logró en las urnas”. ¡Auch!
Alcaldesa está “hasta la coronilla”
La que “no da su brazo a torcer” en Sinaloa, nos comentan, es la alcaldesa de Guasave, Cecilia Ramírez Montoya (Morena), quien de plano dejó ver que está fastidiada de las protestas de policías jubilados, quienes desde principio de año exigen cada mes el pago retroactivo del aumento salarial que les corresponde por ley. Sin embargo, doña Cecilia, sin la menor empatía, les mandó decir que “no se va a convertir en un asaltabancos para obtener el dinero que requiere para cumplirles”, pues los gobiernos federal y estatal no le han pasado las participaciones para poder cubrir el pago y, aunque así sea cierto, varios opinan que no son las formas de responder a los que son sus gobernados ¿o no?
Morenistas ven fiscalía sin cambios
Desde Guanajuato, nos comentan que el secretario general de Morena, Jesús Ramírez Garibay, estalló conta la fiscalía estatal, luego del trato que recibieron al interponer la denuncia contra el exgobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo (PAN), por la llamada “casa azul”. Nos señalan que don Jesús acusó que, a más de cinco meses de la llegada de Gerardo Vázquez Alatriste a la dependencia, las cosas operan como antes, con las mismas personas que estaban con Carlos Zamarripa Aguirre, como el caso del fiscal especializado en investigación en delitos de alto impacto, Marco Antonio Inda Jaime, quien no le dio “un cordial trato” a la cúpula morenista, que señala que el cambio “sólo fue cosmético”. ¡Zas!