Desde Zacatecas, nos platican que “ni tardo ni perezoso” salió Rodrigo Reyes Mugüerza, secretario general del gobierno de David Monreal Ávila (Morena), a presumir que Fresnillo fue desbancado por Villahermosa, Tabasco, del primer lugar en la encuesta de percepción de inseguridad del Inegi, aunque está en tercer lugar. Nos relatan que don Rodrigo atribuyó “la proeza” a la estrategia de seguridad implementada por su jefe y alardeó que también la capital ha dejado de estar en los primeros tres lugares de esa penosa lista, aunque sus detractores le recordaron que la capital y Fresnillo ahora son gobernados por la oposición y le recomendaron no “echar las campanas al vuelo”, pues en los últimos tres años se ha disparado el número de desaparecidos y justo en la tierra de don David, se concentra el mayor número. ¡Auch!
Y... ¿dónde está el alcalde?
Al que le queda eso de “luz de la calle, oscuridad de la casa” en Sinaloa, nos cuentan, es al alcalde de Culiacán, Juan de Dios Gámez Mendívil (Morena), pues anda muy activo en redes sociales y eventos partidistas, cuando su municipio arde por la violencia, además de que mucho menos es capaz de atender una manifestación. Nos relatan que una de sus detractoras es la regidora y presidenta de la Comisión de Turismo del Cabildo, Erika Sánchez Martínez (PRI), quien criticó que don Juan de Dios se desvincule del sector turístico y empresarial, y haya dejado solos a los ciudadanos en un momento tan difícil y prueba de ello es que ni siquiera “asomó la vista” a la protesta de este jueves, para pedir justicia por los dos niños asesinados. ¡Qué mal!
“Reparan” afectados por prohibición
Donde quedó la polémica, nos comparten, es en Chiapas, luego de que el gobernador Óscar Eduardo Ramírez Aguilar (Morena) prohibió las peleas de gallos y las carreras de caballos, como parte de la estrategia para combatir la inseguridad, pues consideró que estas actividades en muchas de las ocasiones han terminado en conflictos y “el horno no está para bollos”. Sin embargo, nos indican que las personas que se dedican a esta actividad “pegaron el grito en el cielo” y se han manifestado para exigir que sea levantada la restricción, porque son cientos de familias que viven de estos espectáculos y molestos le recordaron a don Eduardo cuando montaba muy a gusto en las cabalgatas cuando era candidato. ¡Zas!