Los que andan “que no los calienta ni el sol” en Veracruz, nos platican, son los liderazgos morenistas por la decisión de la cúpula nacional de haber realizado una alianza de facto con los panistas Miguel Ángel Yunes Linares y Miguel Ángel Yunes Márquez. Nos dicen que el dirigente estatal de Morena, Esteban Ramírez Zepeta, no se aguantó y exigió al senador Gerardo Fernández Noroña (Morena) que deje de negociar con los “Yunes azules” porque en tierras jarochas son “el enemigo público número 1”, pero varios soltaron la carcajada contra don Esteban porque el joven Miguel Ángel presumió su reunión con la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, y con el coordinador morenista en el Senado, Adán Augusto López Hernández. ¡Auch!

Libra alcaldesa “golpe” de Ileana

La que “casi resbala” con la tormenta tropical Ileana en Baja California Sur, nos comentan, fue la alcaldesa de La Paz, Milena Quiroga Romero (Morena), ya que viajó a la Ciudad de México “por gestiones de alcaldesa reelecta”, pero lo hizo en los días en que se formó el fenómeno meteorológico y amenazaba a su municipio. Nos indican que su ausencia fue tan notoria que hasta el gobernador Víctor Castro Cosío (Morena) llegó a comentar que se le extrañaba en las sesiones de protección civil, pero doña Milena tuvo la suerte de que el fenómeno desvió su trayectoria, y aunque regresó “echa la mocha”, sólo arruinó sus “días de puente” en la capital del país. ¿habrá sido un pésimo timing?

Presidente municipal no ve la suya

Desde Sinaloa, nos comparten que al alcalde de Guasave, Martín Ahumada Quintero (Morena) “cuando no le llueve, le llovizna”, pues primero tuvo que lidiar con conflictos políticos y ahora con los reclamos tras el paso de la depresión tropical Ileana. Nos detallan que, a pesar de las inundaciones, don Martín decidió no cancelar los festejos del que sería su último Grito de la Independencia, y presuntamente dejó al garete a decenas de personas, sobre todo las que viven en las partes bajas del río Sinaloa, lo cual despertó decenas de críticas, aunque varios aseguran que se trata más de “fuego amigo” y uno que otro detractor resentido. ¡Zas!