Al que le estalló en la cara un escándalo más en Veracruz, nos platican, es al delegado de Programas de Bienestar, el morenista Juan Javier Gómez Cazarín, luego de que se filtraron unas imágenes íntimas y supuestas acusaciones en su contra por acoso. Nos señalan que don Juan Javier salió a defenderse y amenazó con emprender acciones legales, acogiéndose a la Ley Olimpia y, no había ni terminado de defenderse, cuando sus detractores le recordaron todas las “guerras sucias” que emprendió contra sus adversarios y que, nos aseguran, salieron de su oficina cuando fue presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso local. ¡Karma!, dicen algunos.
Descarta lideresa panista nuevo cargo
Desde Chihuahua, nos cuentan que la presidenta estatal del PAN, Daniela Álvarez Hernández, salió a desmentir los rumores que corrieron “como pólvora” sobre su presunta salida del cargo para integrarse a un lugar en el gobierno del estado. Nos detallan que doña Daniela anduvo “muy movida” en los últimos días, presumiendo fotos con diferentes funcionarios estatales y con la gobernadora María Eugenia Campos Galván (PAN), lo que dio pie a que uno que otro “le cargara el milagrito”, por lo que tuvo que salir a aclarar que seguirá al frente de la dirigencia panista y no tenía interés en algún puesto por ahora, pues está concentrada en sacar adelante al partido rumbo a 2027 (y vaya que le hace falta).
Cuernavaca sin “suspirantes” propios
Desde Morelos, nos comentan que varios morenistas se preparan para competir por Cuernavaca en 2027, pero lo malo es que algunos no son originarios de ahí. Nos indican que, de los más apuntados, están los diputados federales morenistas Juan Ángel Flores Bustamante, quien gobernó por seis años el municipio de Jojutla, y Agustín Alonso Gutiérrez, quien hizo lo propio en Yautepec (donde uno de sus hermanos entró en suplencia de su padre, Agustín Alonso Mendoza), pero llamó la atención que “de buenas a primeras” cambiaron su look y con don Agustín fue más notorio, porque “colgó el sombrero campirano” que distingue a su familia, para darse un “aire cosmopolita”. ¡Arroz!