El que sigue en Chihuahua en plan de “celebridad”, más que un procesado por la justicia, nos platican, es el exgobernador César Duarte Jáquez (PRI), pues retomó su vida pachanguera. Nos recuerdan que don César continúa en libertad condicional y con un brazalete por las acusaciones de peculado y asociación delictiva, pero eso parece “peccata minuta”, pues fue visto el pasado fin de semana echando unos alipuses y muy sonriente con los asistentes al Studio Bar, en la capital del estado, pero varios recuerdan que no es la primera vez que han “echado de cabeza” a don César y sus espontaneas escapadas a centros nocturnos, donde incluso se la ha visto “echarse los pasos prohibidos”. ¡Que siga la fiesta, qué, qué!
Congreso de Morelos no ha confirmado renuncia de fiscal
Desde Morelos nos cuentan que ante las especulaciones para ver quién sería el nuevo secretario de Gobierno por el fallecimiento de Juan Salgado Brito (Morena), la gobernadora Margarita González Sarabia (Morena) nombró en el cargo al fiscal Edgar Antonio Maldonado Ceballos, quien es cercano a ella desde que estaba en la Lotería Nacional. Nos indican que para don Edgar fue un respiro, pues con la violencia en el estado, su labor en la fiscalía era cada vez más complicada. Sin embargo, nos dicen que el pequeño detalle es que presentó su renuncia al cargo de fiscal, pero no ha sido ni aprobada ni rechazada por el Congreso local y, aunque se espera que pronto sea aceptada, algunos se preguntan ¿qué sucederá si la rechaza sólo por hacer la maldad? ¡Ups!
Enfría góber a los adelantados
Nos comentan que el gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya (Morena), mandó el mensaje “fuerte y claro” a los “suspirantes” que buscan sucederlo en el cargo para que enfríen sus ánimos futuristas electorales, pues observa muy acelerados a varios en su partido y todavía le quedan dos años en el cargo. Nos indican que don Rubén les recordó que muchos ojos vigilan la actuación en la vida política, por lo que aquellos madrugadores deben cuidar las formas y ser respetuosos de los tiempos que marca la ley para no ser acreedores a futuras sanciones que los dejen fuera de la jugada o lo que es lo mismo: “Sobre aviso no hay engaño”.